Una puñalada "certera" en el corazón y una escisión entre pandilleros: caen los asesinos de Álex el trinitario

La Policía ha detenido a seis miembros de los Trinitarios, una de las principales bandas latinas que operan en Madrid, por la muerte de Álex, el joven pandillero de 23 años que fue asesinado en marzo del año pasado en el distrito de Tetuán. La investigación ha sido larga y ha culminado, este mismo mes de mayo, con el arresto del último de los seis atacantes del joven.

Álex, que pertenecía a los Trinitarios "y no era un cualquiera" dentro del organigrama de la banda, según detallan fuentes conocedoras de la investigación, fue sorprendido en la calle de Bravo Murillo. Seis jóvenes encapuchados le rodearon, agredieron y le asestaron una "certera" puñalada en el corazón que, a la postre, acabó con su vida. Pese a la brutalidad del ataque, Álex intentó huir del lugar tras recibir el navajazo. Corrió unos metros, pero terminó por desplomarse antes de perder la vida.

La investigación, que ha liderado el Grupo VI de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía Nacional de Madrid, ha terminado con seis miembros de esta banda latina en prisión. Igualmente, ha sido una tarea minuciosa que, según han confirmado las fuentes policiales consultadas, ha permitido conocer que el ataque respondió a una disputa de poder. También que los atacantes y el agredido eran de dos facciones diferentes dentro del esquema de los Trinitarios: los 4K -en refencia a Cuatro Caminos- y una escisión de esta corriente llamada "La Ventilla".

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En el mes de octubre fueron arrestados cinco de los seis agresores en el mismo distrito de Tetuán, pero el sexto integrante de esta jauría que acabó con la vida de Álex escapó de España el día inmediatamente posterior al crimen. Por ello fue necesario contar con la colaboración de la Interpol para traerlo a territorio nacional. Uno de los implicados en el asesinato era menor.

Historial de peleas

La paliza que terminó con Álex muerto no fue la primera entre estas dos facciones. Según confirman las fuentes consultadas, "hubo agresiones anteriores", si bien es cierto que este caso es el primero que terminó en un homicidio.

En un primer momento, los investigadores no descartaron la hipótesis -habitual en estos sucesos- de que bandas rivales, como hubieran podido ser los DDP (Dominican Don't Play) hubieran protagonizado este asalto al pandillero trinitario. Sin embargo, conforme avanzaron las pesquisas, quedó claro que murió a manos de una escisión de su propia pandilla.