Madrid cierra Cibeles y solo mantendrá servicios esenciales como policía y bomberos
El Ayuntamiento de Madrid aprueba en su junta de gobierno un nuevo paquete de medidas, que se unen a las anunciadas por la Comunidad, para frenar la propagación del virus
La junta de gobierno del Ayuntamiento de Madrid se reunió este jueves en el Palacio de Cibeles para aprobar un nuevo paquete de medidas, "esta vez drásticas" avanzaron fuentes del consistorio, para intentar frenar la propagación del coronavirus en la ciudad y en la Comunidad que, en estos momentos, aglutina más del 50% de los casos que suceden en España. Tras haber ordenando el cierre de los centros culturales municipales, polideportivos, bibliotecas y teatros, el Ayuntamiento decreta hoy también el cierre de las oficinas de atención al público y envía a todos sus empleados a casa.
Todo el personal del consistorio podrá teletrabajar a partir de este viernes, a excepción de los servicios esenciales como policía, bomberos y mantenimiento de túneles. "Todo el personal del consistorio" tendrá derecho a trabajar de forma telemática a partir de mañana, anunció el alcalde, José Luis Martínez-Almeida.
Además, el consistorio advirtió que será “la primera administración que adopte medidas para paliar la situación económica” y anunció que rebajará 63 millones de euros en impuestos de IBI y IAE. “Sabemos que en estos meses habrá ERTES y habrá finalizaciones de contratos temporales como consecuencia de la caída del consumo. El plazo que nos damos es del 1 de enero al 31 de diciembre. Si son capaces de remontar el empleo, les beneficiaríamos con esos 63 millones”, anunció la vicealcaldesa, Begoña Villacís, que también confirmó aprobar moratorias en otras tasas como la de vado y cajeros, así como la suspensión de los plazos para trámites administrativos: “A nadie le va a vencer un plazo en estas circunstancias”, explicó.
Además, Madrid ordena el cierre de los mercadillos de la ciudad, incluido el emblemático Rastro que cada fin de semana recibe miles de visitas. La Comunidad de Madrid decidió el pasado lunes cerrar las guarderías, colegios y universidades de toda la región. A partir de ese momento el goteo de suspensión de actividades y de cierre de servicios ha sido continuo. También los principales museos (El Prado y el Reina Sofía) así como todos los dependientes de Patrimonio Nacional (Palacio Real, Las Descalzas y el Palacio de El Pardo entre otros) permanecen desde este jueves completamente cerrados al público. La primera medida fue limitar el número de turistas por grupo pero, finalmente, el cierre llegó.
Además, el consistorio advirtió que será “la primera administración que adopte medidas para paliar la situación económica” y anunció que rebajará 63 millones de euros en impuestos de IBI y IAE. “Sabemos que en estos meses habrá ERTES y habrá finalizaciones de contratos temporales como consecuencia de la caída del consumo. El plazo que nos damos es del 1 de enero al 31 de diciembre. Si son capaces de remontar el empleo, les beneficiaríamos con esos 63 millones”, anunció la vicealcaldesa, Begoña Villacís, que también confirmó aprobar moratorias en otras tasas como la de vado y cajeros, así como la suspensión de los plazos para trámites administrativos: “A nadie le va a vencer un plazo en estas circunstancias”, explicó.
La junta de gobierno del Ayuntamiento de Madrid se reunió este jueves en el Palacio de Cibeles para aprobar un nuevo paquete de medidas, "esta vez drásticas" avanzaron fuentes del consistorio, para intentar frenar la propagación del coronavirus en la ciudad y en la Comunidad que, en estos momentos, aglutina más del 50% de los casos que suceden en España. Tras haber ordenando el cierre de los centros culturales municipales, polideportivos, bibliotecas y teatros, el Ayuntamiento decreta hoy también el cierre de las oficinas de atención al público y envía a todos sus empleados a casa.