Insultos y amenazas en una pelea por una terraza en Santa Cruz de Tenerife

Una de las consecuencias de la fase 1 de la desescalada es que las terrazas, por fin, han vuelto a recibir clientes. Casi dos meses después de la entrada en vigor del estado de alarma por el coronavirus, más de la mitad de los españoles han tenido la posibilidad de poder tomarse un café o una cerveza al aire libre en una de sus terrazas favoritas.

Sin embargo, el hecho de que no hayan abierto todos los establecimientos y de que aquellos que lo han hecho solo hayan podido ofrecer la mitad de las mesas ha provocado que haya más demanda que oferta en esos lugares de ocio. Y una consecuencia de esa fuerte demanda es la pelea que ayer tenía lugar en Tenerife entre quienes trataban de hacerse con una preciada mesa.

Según publica Diario de Avisos, los hechos sucedían este lunes por la noche en la Plaza de Tomé Cano de Santa Cruz de Tenerife. Allí hay un local que tenía instalada una terraza y en el que quedó libre una mesa que trataron de ocupar dos grupos de personas. Primero intercambiaron opiniones y a continuación el enfrentamiento fue subiendo de tono.

Amenazas e insultos por una terraza

En el vídeo que grabaron unos vecinos se ve cómo de las palabras se pasan a los insultos y, más tarde, a las amenazas. Los dos grupos que trataron de hacerse con la mesa libre comenzaron a increparse gravemente, aunque afortunadamente no llegaron a las manos gracias a que algunas personas de ambas facciones mediaron entre ellos.

En Zaragoza dos mujeres borrachas provocaron una pelea en otra terraza que terminó con una de ellas en el hospital con la nariz rota

Sin embargo, las imágenes dejan claro que el civismo que están mostrando la mayoría de los españoles no fue el ejemplo de este grupo de personas que estuvieron a punto de provocar una pelea por el mero hecho de sentarse en una terraza. Una situación que no fue el único altercado que se produjo en los bares españoles este lunes.

Tal y como publica Hoy Aragón, dos mujeres en claro estado de embriaguez, de 32 y 28 años respectivamente y que eran tía y sobrina, comenzaron a increpar a los clientes que estaban sentados en una terraza de Zaragoza. Otra mujer que se encontraba con su pareja respondió a los insultos y las tres terminaron en una pelea a la que se unieron varias personas. Finalmente, cuando llegó la policía, todos se dispersaron, aunque una de las agresoras fue trasladada a un hospital con una fractura en la nariz. Según algunos testigos, ella misma se habría provocado la herida al caerse durante la refriega.