Cuando el 'reggae' llegó a la Valencia de 1982: rastas, casetes y canutos compartidos con los Wailers de Bob Marley

Cuando el reggae llegó a Valencia, Bob Marley llevaba muerto un año. Lo que desde hace décadas entendemos como tendencias culturales de inmediata implantación a nivel global, en la España posfranquista y transicional, anterior a la integración europea, se llamaba retraso estructural.

En agosto de 2023, el festival de reggae Rototom Sunsplash congregó a 220.000 asistentes en el recinto de festivales de Benicàssim. De todos los macrofestivales valencianos, solo el Arenal Sound de Burriana, centrado en los actuales sonidos urbanos mainstream, capturó más público.

Que un estilo tan específico como la música de raíz jamaiquina logre cada año completar el monumental aforo de la localidad castellonense se debe a la internacionalización de la propuesta y a la apertura hacia otros estilos mestizos, pero la presencia de público nacional es tan notable que la escena reggae valenciana y estatal encuentra en el Rototom, un punto de encuentro anual donde consolidar sus propuestas desde 2010, año en que el festival recaló en la comarca de La Plana. En territorio valenciano y, probablemente, también a nivel estatal, el origen de la escena reggae lleva por nombre Jah Macetas y por fecha 1982.

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En la Jamaica de los años sesenta, algunos jóvenes músicos recogieron el legado del estilo rocksteady para transformarlo en un nuevo sonido. El reggae actual floreció con Toots & The Maytals, Prince Buster, Jimmy Cliff, Desmond Dekker y los Wailers de Bob Marley y Peter Tosh. La repercusión mundial de Marley en los años setenta convirtió el reggae en la mayor influencia musical del pop anglosajón: The Clash, Madness, The Specials, UB40 y The Police.

El líder y cofundador de Jah Macetas, Sergio Monleón (Valencia, 1960), fue uno de los primeros músicos españoles que recogió la raíz original de la isla caribeña mientras aquí llegaba tamizada por el punk inglés y la vertiente ska. "En 1978 conocí a un alemán que me introdujo en los valores de la filosofía rastafari. Me trajo una serie de casetes de reggae y el catálogo de la tienda londinense de discos Dub Vendor. Me empapé de aquella música y un viaje de interrail por Europa hizo el resto: en Berlín acudí a varios conciertos de reggae porque a España solo venían Bob Marley, Eddy Grant y Desmond Dekker".

Los vinilos adquiridos en sus viajes a Londres sonaban en Les Palmeretes donde Sergio realizó el primer homenaje a Marley, y también en La hora rasta, el único programa de radio que difundía reggae en Valencia. "Con mis discos y los de mi amigo Salva Montmeneu se radiaba la música jamaicana en esta ciudad. A las tiendas valencianas de música como Viuda de Miguel Roca llegaba solo el reggae comercial que distribuían los sellos CBS o Polydor", recuerda Monleón.

Fede Ferocce tenía 20 años en 1982 y era vecino del barrio de Marchalenes. Por aquel entonces cursaba la carrera en la facultad de Psicología y andaba liado con el grupo de rock Inhibidos Quizás?, hasta que conoció a Sergio Monleón. "Enganchamos a otros estudiantes y a vecinas de Sergio, como las coristas Marisol y Mari Tere Álvarez, hasta juntar a ocho personas, entre ellos Julio Beltrán, vocalista que dio el nombre a la banda solo en nuestro concierto debut: Julio Fari y Sus Macetas. Debutamos en una fiesta del Ágora de la Universidad Politécnica promovida por Mar Monsoriu. No había escena de clubs ni de músicos reggae en Valencia, absolutamente nada, pero es que a nivel nacional solo conocíamos a unos vascos llamados Potato".

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Como propuesta única de reggae clásico, Jah Macetas fueron pioneros en España, junto con los vascos Potato aunque éstos incorporaban el vértigo del ska. "Yo soy del mantra de los ritmos jamaicanos lentos y no de la velocidad, eso no me aporta", comenta Monleón. "Enseguida nos interesamos por el dub y esa manera de alargar los temas mediante ecos, silencios y prolongaciones de bajo y batería. Alucinamos por la ruptura sonora que supuso en los primeros ochenta y aprendimos a ir fumados desde las nueve de la mañana", rememora Ferocce.

La sala de conciertos Planta Baja, en el barrio del Carmen, apareció como punto de encuentro de los escasos amantes del género y también para los mods y los scooters que escuchaban ska británico. "Como público íbamos a Planta Baja sin saber quién actuaba, como músicos hubo fines de semana que tocamos viernes y sábado noche, además de domingo por la tarde, triple sesión y sustituciones. Con caché de 15.000 a 20.000 pesetas a repartir entre mucha gente", expone Fede.

La grabación de Jah Macetas Dub Enbabia es la primera incursión en la historia de la música reggae registrada en territorio valenciano. "En 1983 publicamos casetes grabadas en el Microestudio de Ramón Gilabert y las vendíamos pirateadas en cintas Sony. Sacamos alrededor de cien copias de la primera maqueta con la portada fotocopiada y personalizada después con dibujos diferentes para cada comprador", afirma Fede, "siendo pioneros del género creamos un buen puñado de fans del reggae en la ciudad. Algunos de los chavalines que comenzaron asistiendo a nuestros conciertos formaron más tarde nuevos grupos del estilo, como Los Naturals o Natty Dread".

En 1978, los periodistas de Televisión Española Àngel Casas y Carlos Tena entrevistaron a Bob Marley en plena pista de aterrizaje del aeropuerto de Ibiza para recoger sus impresiones antes del concierto de The Wailers. Años más tarde, The Wailers volverían sin Marley a la isla balear y con Jah Macetas como teloneros. "Mi momento culminante antes de dejar el grupo en 1988 fue tocar en Sant Antoni de Ibiza con The Wailers, en 1987. Allí estaba todo el famoseo hippie nacional. Compartimos camerino y porros con el grupo jamaicano.

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Su guitarrista llevaba una de esas guitarritas tipo raquetita sin clavijero que son muy funcionales para viajar, pero cuando vio mi Fender Stratocaster me la pidió prestada para su concierto. Estuve sin cambiar las cuerdas de esa guitarra más de seis meses", añade Ferocce. "El teclista Earl Wya Lindo arrastraba algunos problemas psicológicos así que el director musical y bajista de los Wailers, Aston Family Man Barret, me indicó que su músico solo fumaría de mi marihuana porque era muy flojita. Trabamos amistad y los acompañé cuando vinieron a Valencia a tocar en el Greenspace y a la antigua sala Roxy", incide Monleón.

Durante la segunda mitad de los años ochenta y, sobre todo, en los años noventa, ya en una Valencia con una escena reggae sólida, Jah Macetas se convirtió en una de las bandas indispensables del reggae nacional con músicos como Pere Andrés El Rumbero Jamaicano, Rafa Villalba, Santi Navalón, Alberto Tarín, Eduardo Martí, Arístides Abreu, Remi Carreres, José Luis Macías y Steven Wright, entre otros. "Fui el promotor del concierto de la leyenda del reggae Pablo Moses, en Arena Auditórium, en 1989. Allí conocí al guitarrista Steven Wright. Éste empezó a pasar largas temporadas en Valencia y aprendimos mucho de su experiencia musical, su conocimiento del género y la filosofía rastafari. Grabó con nosotros el disco Toda una vida (1990) y aquel fue el punto de inflexión en la profesionalización de Jah Macetas", concluye Monleón.