Compró un juguete hace años y ahora tiene el mayor museo de España: "No quería enseñarlos"

El museo del juguete más grande de España está en Valladolid. En concreto, en la localidad de Medina del Campo, donde José Manuel Fernández ha levantado Ricordi Juguetes Reunidos, una nave de más de 1.000 metros cuadrados donde alberga 10.000 de estos objetos que son auténticas piezas de coleccionista. Hace más de veinte años este leonés afincado en una pedanía cercana a Tordesillas compró su primer juguete: un autobús Mercedes de Rico.

Tras él, miles más que ha ido adquiriendo en diferentes mercados tanto nacionales como internacionales, además de en subastas. Otros muchos, asegura, se les han ofrecido de forma directa. Una auténtica pasión por los juguetes y su historia que José Manuel ha convertido en uno de los museos privados más importantes de Europa en este ámbito y en el más relevante de España.

Recorrer esta enorme nave es hacerlo por la historia del juguete, especialmente, desde los años cuarenta hasta los ochenta. Todos ellos se encuentran en un excepcional estado de conservación. Actualmente, 8.500 están expuestos en sus vitrinas, pero la colección con la que cuenta José Manuel asciende hasta los 10.000 juguetes que se pueden visitar en este museo desde que abriese sus puertas el pasado mes de junio en la localidad vallisoletana.

Hablar de juguetes es normalmente sinónimo de hacerlo sobre infancia, pero José Manuel insiste en que este se trata de un museo que no solo fascinará a los más pequeños, sino también a sus padres. E incluso abuelos, que han podido jugar con las piezas expuestas a lo largo de un recorrido que se puede realizar en 45 minutos de duración.

"Todo empieza con un autobús de la marca Rico de los años sesenta que cuando yo era niño estaba todo el día publicitándose en la tele, pero que nunca pude tener por precio y por la poca producción que hubo. Después, de mayor, lo compré y a raíz de esa pieza han venido todas las demás", recuerda José Manuel Fernández.

En la carretera de La Seca se encuentra este museo que, desde que comenzase su andadura este verano y después se inaugurase con la presencia del Padre Ángel en el mes de octubre, no ha dejado de recibir visitas. Todas ellas en pequeños grupos que son guiados por diferentes trabajadores de las instalaciones.

Abierto a todo el público

Aunque José Manuel lleva dos décadas coleccionando piezas, fue después de la pandemia cuando comenzó a pensar en la posibilidad de abrir su colección privada al público animado por familiares y amigos que consideraban que alguien más debería disfrutar de todos estos juguetes. El balance hasta el momento es más que positivo, reconoce este leonés.

"Yo ya tenía una nave más pequeña y entonces me ofrecieron esta que es mucho más mayor. Fui colocando todo y la gente empezó a decirme que esto había que exponerlo y no se podía quedar cerrado. Lo fui planteando y avanzando. En principio yo no era partidario de hacerlo, pero me alegro de haberlo hecho. A la gente le gusta y le hace mucha ilusión, además se reencuentran con juguetes que hace mucho tiempo que no veían y que habían jugado con ellos", afirma el coleccionista.

La mayoría de los juguetes que se pueden ver son españoles, pero también hay otros europeos. Las piezas más antiguas, unas mesas de latón, datan del año 1915 aunque el mayor número de estos pertenecen a los años ochenta y noventa. Un recorrido en el que no falta ninguna pieza del imaginario español como la Mariquita Pérez o la Barbie.

"Es un reencuentro. Igual que cuando ves un coche te acuerdas de tu padre o de tu abuelo, los juguetes te recuerdan a ti, cuando jugaste con ellos o cuando te los echaron los Reyes Magos en no sé qué año. Eso es lo que más gusta y motiva a los visitantes", señala el leonés en cuanto a la reacción de los visitantes al conocer este museo.

José Manuel asegura que ya no se encuentra detrás de ninguna pieza y que desde hace tiempo solo espera a encontrarse con alguna pieza o que se le ofrezca algo. “A veces trasteas en internet, pero lo que me está llegando es por ofrecimientos. Cada vez es más complicado porque me voy encontrando que ya tengo esas cosas”, confiesa.

Entre los objetos más curiosos que alberga esta nave destaca el primer coche teledirigido de Jyesa, Renault 4 de Sanchís, diferentes coches de la casa Rico, el Trailer Pegaso de Rico o el cochecito leré. Este último, además de ser una canción para niños, existió, es un coche muy pequeño y fue creado en la localidad alicantina de Denia en el año 1925.

"El que más llama la atención es una pieza de Tente de más de cincuenta años, un Palacio de Oriente de grandes dimensiones que impacta a quien lo ve por primera vez. Son más de 100.000 piezas y fue montada por los propios trabajadores de Tente y estuvo expuesta en la fábrica de Barcelona mientras estuvo abierta", reconoce.