Policías declaran un "conflicto colectivo" a Marlaska: "Quiere entregar los aeropuertos a Mossos y Ertzaintza"

La Confederación Española de la Policía (CEP), uno de los sindicatos históricos del cuerpo ha dado un paso que ahonda en la brecha entre el ministro Fernando Grande-Marlaska y las fuerzas de seguridad. Este colectivo ha declarado a Interior un “conflicto colectivo” y se dicen hartos de que el ministro ignore sus demandas y oculte los planes que afectan a la institución. Entre sus denuncias, incluyen el secretismo en torno a la Instrucción desvelada por El Confidencial que cede a los Mossos d’Esquadra y a la Ertzaintza el control de la seguridad en puertos y aeropuertos de Cataluña y el País Vasco, infraestructuras consideradas frontera exterior europea.

“Un Ministerio que quiere entregar la seguridad de puertos y aeropuertos de Cataluña y País Vasco a Mossos y Ertzaintza no puede tener enfrente a sindicatos que no estén a la altura de lo que los compañeros nos piden”, dice la circular de la CEP en la que anuncian esta medida. El conflicto colectivo es una carta en poder de los sindicatos para forzar al Ministerio a una reunión con los representantes de los policías. Se trata de un pleno extraordinario en el Consejo de la Policía, órganos de representación entre Interior y los sindicatos.

La CEP cuenta con dos vocales en ese órgano de los 14 que tienen los sindicatos, por eso invitan al resto de colectivos a sumarse a esta iniciativa: “Los policías no van a entender que sigamos actuando como si nada pasara. Ya no valen las excusas. Por eso hay que plantarse”. En ese encuentro pretenden abordar también las cuestiones que les llevaron a celebrar el pasado 16 de marzo una multitudinaria manifestación en Madrid con representación de todos los sindicatos. “Nada ha cambiado; siguen dando largas a la agenda de los problemas que más preocupan a los policías. Por tanto, seguir esperando ya no es una opción”.

Estas demandas tienen que ver con el reconocimiento de una “jubilación digna, para que los compañeros no pierdan cientos de euros después de jugarse la vida durante décadas”. También incluir a la Policía Nacional entre las “profesiones de riesgo”, para poder jubilarse a los 60 años sin perder dinero “como ya lo hacen las Policías autonómicas y locales y colectivos como los artistas, toreros, bomberos, personal de vuelo de líneas aéreas o mineros”. Insisten en el “cumplimiento del acuerdo de equiparación salarial, que no fue tal, pero sigue sin ejecutarse” así como una mejora de las retribuciones para igualarlas con las de otros Cuerpos.

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Alejandro Requeijo

Otra de las reclamaciones que hace la CEP y que ha marcado buena parte de su discurso en el último año es dotar a los agentes de mayor protección física y jurídica después de que en 2023 se alcanzara “el vergonzoso récord histórico de agresiones, con 1.400 mensuales a policías y guardias civiles y sin que nadie frene ya este deterioro del principio de autoridad en las calles”.

“Dice el Ministerio del Interior que le preocupa la seguridad de los policías. Pero vuelve a anunciar en sede parlamentaria un proyecto para recortar la Ley Orgánica de Protección de la Seguridad Ciudadana, que es esencial para nuestro trabajo en la calle”, dice este sindicato. Recuerda que Interior no cumple la sentencia ganada por CEP en febrero de este año en el Tribunal Supremo que le obliga a contratar un seguro de responsabilidad civil para los policías ni compran más inmovilizadores eléctricos cuando sólo hay 1.600 para todo el Cuerpo.

“Interior tendrá que sentarse con nosotros para explicarnos cómo y cuándo va a llevar a cabo esas mejoras que pedimos, por las que todos nos hemos manifestado hace veinte días. Los mismos que se ponen medallas con nuestro trabajo, los que una y mil veces repiten que somos esenciales para la sociedad, son los mismos que no mueven un solo dedo para mejorar nuestras condiciones profesionales”, zanja.