El Gobierno evita revelar los usos del Falcon y su coste durante la campaña del 28-M
El Ministerio de Defensa asegura que no puede "disociar" el coste concreto de los viajes de sus aeronaves del resto del presupuesto. En respuesta a una solicitud a Transparencia, solo desvela dos desplazamientos
El Gobierno evita revelar quién, cuándo y por qué utilizó los aviones oficiales durante las dos semanas de campaña para las elecciones autonómicas y municipales del 28-M. También cuánto costaron esos desplazamientos, de los que solo detalla dos vuelos, en ambos casos de la ministra de Defensa, Margarita Robles, para acudir a actos oficiales a bordo de los Falcon 900B. El 45 Grupo de Fuerzas Aéreas, ubicado en la base aérea de Torrejón de Ardoz, tiene como principal misión "el transporte de autoridades", tanto de la Casa Real como del Ejecutivo, y para ello cuenta con dos aviones Airbus 310 y cinco Falcon 900B, según detallan en su propia página web.
El 5 de junio, apenas una semana después de las elecciones, El Confidencial requirió al Ejecutivo todos "los nombres de los integrantes del Gobierno" que utilizaron las aeronaves "entre el 12 y el 27 de mayo", esto es, durante el periodo de campaña. La solicitud de acceso a la información pública, cursada a través del portal de transparencia, inquiere también "el número de ocasiones en que las han utilizado, así como las fechas, destinos y costes de estos desplazamientos durante las fechas mencionadas". En su respuesta, rubricada por el general segundo jefe del Estado Mayor del Ejército del Aire y del Espacio, Fernando de la Cruz Aravaca, consideran que "procede conceder acceso" a la información "en lo tocante a vuelos de transporte del Ministerio de Defensa". Defensa obvia así el grueso de las preguntas formuladas por este diario, que preguntaba explícitamente por el uso de aviones "para trasladar al presidente y a otros miembros del Ejecutivo".
El teniente general De la Cruz Aravaca no detalla los motivos por los que acota toda réplica a dos viajes de Robles, los días 23 y 24 de mayo, a Bruselas y a Roma, respectivamente, con vuelta en el día a la base de Torrejón. En el primero, Robles recurrió al Falcon para asistir a una reunión oficial sobre Defensa del Consejo de Europa; en el segundo, visitó la Escuela de Defensa de la OTAN y participó en reuniones en la misma sede, siempre según su agenda oficial.
No hay ninguna otra referencia sobre el uso de las aeronaves en la respuesta oficial cursada por Transparencia, en la que tampoco se detalla importe alguno: "Respecto al gasto al que hace referencia la pregunta, se significa que los costes de operación de todas las aeronaves del 45 Grupo se sufragan globalmente con cargo al presupuesto ordinario del Ministerio de Defensa, al igual que ocurre con el de otras unidades de las Fuerzas Armadas", justifican.
"Esto hace que no se puedan disociar del cómputo general los costes de determinadas plataformas aéreas para misiones específicas, ya que afectan no solo a las actividades de vuelo, sino al sostenimiento y el adiestramiento de sus tripulaciones, o a los condicionantes operativo-logísticos", reza la misiva. Según la web del Ejército del Aire, los siete aviones suman "una media de 3.900 horas de vuelo anuales". En octubre de 2020, en respuesta a una pregunta parlamentaria de Vox en el Congreso, el Gobierno afirmó que entre enero y octubre de ese año las horas de vuelo sumaban 366.
Pedro Sánchez ha sido duramente criticado por el uso de los aviones oficiales, si bien no es el primer presidente del Gobierno cuestionado por este empleo de medios públicos para actividades que queden fuera —o en la frontera— del paraguas institucional. Ni el Ejecutivo ni la Casa Real detallan de oficio quiénes viajan en las aeronaves, cuándo lo hacen o con qué fines concretos, y las escasas ocasiones en que facilitan información lo hacen en respuesta a preguntas parlamentarias o a solicitudes de acceso a la información pública como la remitida por este medio.
El martes, durante la entrevista al presidente del Gobierno en Telecinco, Ana Rosa Quintana le preguntó por el uso de los aviones oficiales para acudir a actos de partido en las semanas previas a la campaña, agendando actos institucionales para justificar estos desplazamientos: "Yo sé que al PP y a Vox les gustaría que yo viajara haciendo autostop". "Cuando el Falcon lo han usado otros, no ha pasado nada", abundó.
Según los datos recabados por El Economista, gracias a esta vía, publicados en octubre de 2022, entre junio de 2018 y septiembre del pasado año Sánchez había realizado 612 viajes, frente a los 242 de Zapatero; 240 de Aznar; 164 de González, y 148 de Rajoy. El Tribunal de Cuentas, en su informe de Fiscalización de las Contabilidades Electorales de las elecciones europeas de 2009, pidió "una regulación específica" sobre la utilización de medios públicos "para desplazamientos de las autoridades de las administraciones públicas, usados por razones de seguridad, así como de otros medios privados", "con ocasión de su participación en las campañas electorales".
En su informe, publicado en 2010, el organismo fiscalizador lo justificó "a fin de despejar posibles incertidumbres que se pudieran suscitar desde la perspectiva del control sobre este tipo de costes". Ni el PP ni el PSOE, pero tampoco la coalición entre los socialistas y Unidas Podemos, han dado pasos en este sentido.
El Gobierno evita revelar quién, cuándo y por qué utilizó los aviones oficiales durante las dos semanas de campaña para las elecciones autonómicas y municipales del 28-M. También cuánto costaron esos desplazamientos, de los que solo detalla dos vuelos, en ambos casos de la ministra de Defensa, Margarita Robles, para acudir a actos oficiales a bordo de los Falcon 900B. El 45 Grupo de Fuerzas Aéreas, ubicado en la base aérea de Torrejón de Ardoz, tiene como principal misión "el transporte de autoridades", tanto de la Casa Real como del Ejecutivo, y para ello cuenta con dos aviones Airbus 310 y cinco Falcon 900B, según detallan en su propia página web.
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