Un familiar de Samantha, de 'MasterChef', entre las últimas víctimas de la estafa de la 'jet set'

La Audiencia Nacional ha entrado en la última fase de la investigación sobre la macroestafa piramidal que alcanzó de lleno a buena parte de la 'jet set' de Cataluña y Madrid a manos del empresario Antonio Mas. Tras casi cinco años de instrucción, el Juzgado Central de Instrucción 6 acaba de cerrar las últimas declaraciones de los afectados y ha decidido no prorrogar más el procedimiento, que se enviará a juicio en los próximos meses. Entre los últimos afectados en prestar declaración se encuentra un familiar de Samantha Vallejo-Nájera, que declaró el pasado 27 de septiembre como víctima de la trama.

El cebo que mordió este empresario, casado con una prima de la jurado de MasterChef, es el mismo en el que picaron centenares de afectados de la alta sociedad en todo el territorio nacional. Mas, a través de su empresa Publiolimpia, ofrecía elevadísimas rentabilidades a quienes decidían confiarle su dinero, hasta el punto de que se le trata en los medios como un Madoff regional. Antiguo promotor musical, captaba inversores a los que proponía adquirir supuestos espacios publicitarios que en realidad eran de grandes empresas de comunicación. Engañó de este modo a casi 1.200 personas de nueve comunidades autónomas y países extranjeros. Para ampliar su radio de acción, el cabecilla de la trama se alió con la familia San Martín, propietaria de la constructora del mismo nombre.

Según el cálculo de los investigadores, los afectados perdieron casi 300 millones de euros. La lista de apellidos ilustres en el grupo de los estafados es muy larga. Los San Martín, vinculados a Mas a través de una UTE, sirvieron como enlace para alcanzar entornos como el de la familia Segrelles, los Gómez Acebo e incluso los Borbón. Dos primas de la rama italiana del rey Juan Carlos, las Marone Borbón, se encuentran entre las perjudicadas. También figura el expiloto de motos Sete Gibernau.

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Es por ello que, en esta última ronda de declaraciones, la mayoría de los que han declarado tienen vinculación con el sector de la construcción. Además de la persona mencionada, han prestado declaración los representantes legales de Novena Singular y de Núcleo Residencial La Montilla SL y el empresario Víctor Manuel Villar, todos ellos como testigos. Además, este mismo martes se escuchará a uno de los investigados para complementar su declaración.

Se entregó a los Mossos

Según confesó el propio Mas cuando se entregó de forma voluntaria a los Mossos d'Esquadra hace años, la operativa comenzó en 2003 por medio de la sociedad ATA Producciones y continuó en 2012 a través de la mercantil Publiolimpia. El empresario se dedicaba a "adquirir espacios publicitarios de televisión" para vendérselos a los anunciantes. La diferencia entre lo que le costaban esos espacios y el precio al que luego los colocaba a las marcas interesadas era lo que el intermediario ganaba, como él mismo explicó el citado día a los funcionarios de la Unidad de Delitos Socioeconómicos.

Decidió acudir a las autoridades atrapado en su propia red. Cuando el dinero dejó de fluir y ya no pudo cubrir las supuestas ganancias de unos con las aportaciones de otros, comenzó a recibir presiones y amenazas que le asustaron, hasta tal punto que decidió acudir a la policía autonómica. Ahora la estafa está al borde de acabar su fase de instrucción.