La Audiencia Nacional investiga si el atropello de Torre Pacheco fue un atentado yihadista

El Juzgado Central de Instrucción 1 de la Audiencia Nacional investiga si el atropello sucedido hace unos días en la población murciana de Torre Pacheco en el que murieron dos personas después de que un vehículo invadiera la calzada y se empotrara en la terraza de un bar fue en realidad un atentado yihadista. Las diligencias a cargo del juez Alejandro Abascal se abrieron después de que la Policía localizara una confesión manuscrita del conductor del vehículo, informan a El Confidencial fuentes jurídicas.

Fuentes de la investigación han informado de que el caso se ha remitido a la Audiencia Nacional “por precaución”, pero no se descartan otras hipótesis. La carta que dejó el sospechoso ofrece múltiples incongruencias, según los investigadores. En la misiva, manuscrita de un folio de extensión, el sospechoso, Abdellah G., dice haber sido víctima de violencia provocada por trucos mentales y observaciones inverosímiles.

De nacionalidad marroquí tenía en el coche un cuchillo de grandes dimensiones ensangrentado y múltiples restos de sangre en el vehículo. Presentaba una herida provocada por ese cuchillo en el costado. Los investigadores no descartan que se la hubiese provocado a sí mismo antes de irrumpir en la terraza.

El accidente ocurrió sobre las 14.30 horas en el bar Honey's, regentado por personal de nacionalidad india y frecuentado principalmente por británicos, ubicado junto a la avenida de Murcia, la carretera principal, por donde el coche circulaba con exceso de velocidad. Uno de los fallecidos fue el conductor del turismo, de nacionalidad marroquí. El atropello se llevó por delante mesas y sillas de un extremo a otro de la terraza.

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EFE

Las pesquisas se encuentran aún en un punto muy inicial y no se pueden concluir por el momento las intenciones del conductor y si este actuó con intenciones suicidas. Como ha adelantado 'El Mundo', el vehículo empleado por el conductor no era de su propiedad, pero la aparición de la misiva y la presencia de esas heridas de arma blanca autoinfligidas antes de que cometiera el atropello han dirigido la investigación a la posibilidad de una motivación terrorista.

Los hechos hicieron pensar a los agentes en un inicio que lo ocurrido había sido fruto de un accidente por exceso de velocidad. El conductor fallecido circulaba muy rápido por la paralela a la avenida principal de la población cuando, según los primeros datos, perdió el control del coche. Antes de la aparición de la nota, los investigadores barajaban la tesis de una persecución por parte de otro coche.

Además del conductor, en el atropello falleció un cliente de nacionalidad venezolana y resultaron heridas otras dos personas. Los seis clientes que se encontraban en ese momento en el exterior recibieron contusiones. El local se encuentra ubicado en las inmediaciones de un resort de la zona y se produjo pasadas las dos de la tarde, coincidiendo con la hora del almuerzo.