Pino: "Estuve a punto de denunciar a la fiscal por hacer a voces 12 veces la misma pregunta"

El que fuera director adjunto operativo de la Policía Nacional durante el último Gobierno del PP, Eugenio Pino, asegura que estuvo a punto de ir a los juzgados de plaza de Castilla a denunciar por coacciones a los fiscales anticorrupción por hacerle "a voces" hasta "12 veces la misma pregunta" relacionada con el 'pendrive' con información relativa a la familia Pujol que la Policía incorporó al caso que instruía el juez de la Audiencia Nacional José de la Mata. El ex máximo dirigente del cuerpo ha declarado que él no tuvo conocimiento de que se entregara ningún dispositivo en 2017 hasta que "unos amigos" se lo dijeron a posteriori. Así lo ha dicho ante la Sección 23 de la Audiencia Provincial de Madrid, que juzga a Pino y su asesor Bonifacio Díez Sevillano por estafa procesa, falso testimonio y revelación de secretos.

Durante su comparecencia, Pino ha admitido que recibió un pendrive que le entregó el entonces jefe de Asuntos Internos, Marcelino Martín Blas, en 2012, pero ha dicho que en ese momento intentó abrirlo, no pudo, se lo devolvió a su interlocutor y no volvió a saber nada más de esa memoria electrónica. Desconoce, ha indicado, qué pasó después. Su orden, ha incidido, fue que el dispositivo lo entregara el jefe de Asuntos Internos al CNI y a los departamentos de Información y Policía Judicial de la Policía Nacional. No tuvo más noticia del pendrive, ha subrayado, hasta que en 2017 el jefe de seguridad de la Audiencia Nacional le dijo en una comida que los fiscales "se subían por las paredes" por que habían recibido un dispositivo.

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Pino y su entonces asesor, el inspector jefe Díez Sevillano, se sientan en el banquillo por el 'pendrive' con información sobre la familia Pujol que fue aportado como prueba y descartado por la Audiencia Nacional al considerar que su origen era incierto. La Fiscalía pide la absolución, pero las acusaciones reclaman entre dos años y medio y diez años de cárcel para cada uno de ellos. Díez, de hecho, también ha negado haber recibido orden alguna de Pino para entregar el mencionado pendrive. "Nunca me ordenó entregar el pendrive; si me hubiera dado una orden, la hubiera cumplido, porque era mi superior", ha dicho el asesor del director adjunto.

El jefe de Blanqueo de la UDEF, José Manuel Álvarez Luna, sin embargo, ha relatado que en marzo de 2015 su jefe, el comisario Manuel Vázquez, le entregó el pendrive tras recibirlo de Díez. "Me ha venido esto de la DAO con información de inteligencia sobre el caso de la familia Pujol", ha recordado Álvarez Luna que le dijo entonces Vázquez. El jefe de Blanqueo ha relatado que cuando llegó el dispositivo hizo una copia en su ordenador y se lo entregó a funcionarios que dependían de él para que comenzaran a estudiar la información que contenía y que sirvió para que estos remitieran un informa posteriormente a la Audiencia Nacional. Meses después, ha relatado, revisando cajones encontró el original y se lo entregó a sus jefes para que lo entregaran al tribunal.

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Durante la primera sesión del juicio, la acusación sacó a colación un correo electrónico que un inspector jefe de la Udef, Daniel Gallego Villasante, envió a su superior jerárquico, José Manuel García Catalán, y a Díez Sevillano tras la remisión del pendrive a la Audiencia Nacional. En este email, el remitente asegura que el Juzgado 5 había reclamado el aparato y menciona que el asesor de Pino mandó el dispositivo a la Udef por orden del entonces DAO, extremo que ambos acusados negaron durante su intervención. Gallego Villasante, que dijo que se había enterado por los medios de la existencia del pendrive, no supo aclarar quién le había dicho que le enviara el correo a Díez Sevillano.

Los hechos se remontan a 2016. El titular del Juzgado Central de Instrucción 5 de la Audiencia Nacional, José de la Mata, recibió un informe de la UDEF que analizaba documentos sobre la fortuna de Jordi Pujol Ferrusola, pero apreció que el trabajo policial era "confuso", ya que no decía de dónde y de qué manera se habían obtenido los papeles. Para evitar que una prueba dudosa contaminase la investigación en marcha decidió abrir una pieza separada con ese informe e indagar su contenido. La UDEF explicó en un primer momento que los papeles habían aparecido en las entradas y registros practicadas por orden de un juzgado de Barcelona y, en un segundo, que estaban almacenados en bases de datos policiales.

El juez acabó concluyendo que ni la primera ni la segunda afirmación se ajustaban a la realidad, pues los documentos, contenidos en el pendrive, fueron entregados a la UDEF "por una persona vinculada a la DAO, Bonifacio Díez Sevillano, siguiendo instrucciones del DAO Eugenio Pino", extremo que ambos protagonistas han negado hoy. "No solo no ha podido determinarse que la obtención de los documentos incluidos en ese pendrive haya sido legítima, sino que, al contrario, ha quedado establecido que la autoridad policial, más concretamente Pino, por medio del miembro de su Gabinete Díez Sevillano, dio instrucciones incorrectas a las unidades operativas para que utilizaran e incluyeran en un procedimiento penal determinados documentos no solo ocultando su origen, sino facilitando una explicación no ajustada a la realidad sobre el origen y el modo de obtención", señaló De la Mata, que cerró así el caso y lo envió a los juzgados de Madrid al apreciar que el «riesgo relevante» de contaminar la causa penal que investigaba.