Última hora sobre la Manada | La policía les ha detenido y cumplirán 15 años de condena

La atención mediática vuelve a caer sobre la Manada. Después de que el pasado 26 de abril de 2018 la Audiencia Provincial de Navarra hiciese públicas las 371 páginas que formaban su sentencia condenatoria para los cinco miembros de la Manada, los sevillanos José Ángel Prenda, Alfonso Jesús Cabezuelo, Jesús Escudero, Ángel Boza y Antonio Manuel Guerrero por un delito de abuso sexual con prevalimiento, y el 5 de diciembre del mismo año fuese corroborada por el Tribunal Superior de Justicia de Navarra, este viernes 21 de junio es el turno del el Tribunal Supremo.

La Sala del máximo organismo del poder judicial español ha escuchado los argumentos de la Fiscalía y el resto de partes contra una sentencia que todos interpusieron tras conocerse el fallo y finalmente ha decidido aumentar la pena de prisión en seis años, pasando de los nueve hasta los 15 y condenándoles por violación. Además, el Supremo ha sumado también para Antonio Manuel Guerrero dos años más de prisión por robar el móvil a la denunciante después de la violación en los Sanfermines, una pena que no había sido estipulada por la Audiencia Provincial de Navarra.

La publicación de la sentencia ha conllevado la inmediata detención de los condenados, y pocos minutos después de conocerse ya estaban en disposición policial José Ángel Prenda y Alfonso Jesús Cabezuelo.Posteriormente, sobre las 16:00 horas de la tarde la policía ha detenido a Antonio Manuel Guerrero y Jesús Escudero, y unos minutos después también se ha confirmado la detención de Ángel Boza.

Dos horas de vista pública

La vista, que es pública, ha arrancado a las 10:30 de la mañana y que ha finalizado dos horas después dejando el caso visto para sentencia ha estado presidida por el magistrado Andrés Martínez Arrieta, quien formó parte del tribunal del mediático juicio del 'procés' que acabó hace poco más de una semana. Además, le han acompañado la magistrada Ana Ferrer, quien también juzgó a a Oriol Junqueras y los demás encausados catalanes, Francisco Monterdre, Ana Ferrer, Vicente Magro y Susana Polo.

[Así ha sido la exposición de las partes del caso de la Manada]

La Fiscalía ha sido la primera en intervenir y ha mostrado su "más absoluta discrepancia con el TSJN", sosteniendo que sí hubo fuerza intimidatoria y recalcando el pequeño tamaño del habitáculo en el que sucedieron los hechos. Según el Ministerio Fiscal la víctima, ante la situación dada en el portal, sufrió un ataque de ansiedad y adoptó una actitud de "sometimiento y pasividad, manteniendo la mayor parte del tiempo los ojos cerrados". Por eso, la Fiscal pide que se condene a los cinco acusados a 18 años de prisión por varios delitos de agresión sexual y dos años más por el delito de robo.

Tras él ha sido el turno de la defensa de la víctima. Carlos Bacaicoa, que ha hecho una intervención muy breve. La acusación particular a suscrito el relato que ha hecho anteriormente la Fiscalía y ha pedido diez años de control a los acusados tras cumplir la pena que se les imponga.

En la misma línea se ha pronunciado el letrado del Ayuntamiento de Pamplona que ejerce de acusación popular. La administración local denuncia que sí hubo violencia, tanto en el momento en el que metieron a la víctima en el portal, como en el omento de la agresión sexual y ha hecho suyo el discurso del Ministerio Fiscal sosteniendo que el caso es una "descripción paradigmática de lo que es una intimidación". "La situación fue buscada expresamente por los cinco acusados. La queno lo sabía era la víctima", ha indicado el letrado.

La defensa ha pedido la absolución

El abogado de los acusados ha arancado su exposición poniendo en duda las garantías del juicio sobre la Manada. "No hemos tenido un juicio con todas las grantías porque la sociedad dictó sentencia indiscutiblemente condenatoria", ha insitido el letrado de la defensa, quien ha recalcado que este hecho ha dejado prácticamente cerrada la puerta cualquier resolución judicial que no lleve a una condena. Además, Agustín Martínez ha asegurado que ni una sola de las afirmaciones que se vertieron en la denuncia fueron ratificadas en la sala, algo que según él, hay que "poner en relación con los hechos probados".

Además, Martínez ha insistido en que las relaciones sexuales entre la joven y los sevillanos fueron consentidas, pero que fue el robo del móvil, que contenía las imágenes grabadas que en ese momento no se conocían, lo que provocó que la víctima interpusiese la denuncia. "Ella tenía simprelemente que decir no", ha afirmado el agobado. "Claro que no es no, pero para que sea no, hay que decir no", ha insitido para finalizar su alegato.

Se cumple un año de su libertad

Justo este 21 de junio se cumple un año desde que los cinco acusados salieron de prisión preventiva. La Sección Segunda de la Audiencia de Navarra decretó su puesta en libertad provisional a cambio de una fianza de 6.000 euros cuando estaba a punto de vencer el plazo máximo de dos años que establece la legalidad española para que un acusado permanezca entre rejas sin una sentencia firme contra él. Sin embargo, no todos han permanecido todo este tiempo en libertad.

El 1 de agosto de 2018 Ángel Boza fue detenido en Sevilla por el presunto robo de unas gafas de sol en un centro comercial y una supuesta agresión cuando, en su huida, arremetió desde su coche contra dos agentes de seguridad. Boza fue enviado de vuelta a prisión acusado de un delito de robo con agresión cuando había pasado poco más de un mes desde que había salido y allí permaneció hasta noviembre, momento en el que el Juzgado de lo Penal 10 de Sevilla decretó su puesta en libertad.