La infanta Cristina se vuelve a sentar en el banquillo tras sus "no sé" y "no me consta"

El pasado 29 de enero, la Audiencia Provincial de Baleares determinó en su auto que la infanta Cristinadebía continuar en el banquillo de los acusados para ser juzgada como "cooperadora necesaria" de dos delitos fiscales dentro del marco del 'caso Nóos'. Ahora, tras las primeras declaraciones de Iñaki Urdangarin, será su mujer la encargada de hablar, algo que hizo vagamente y con constantes negativas en su primera participación en el juicio.

[La declaración de la infanta Cristina en diez frases]

Ocurrió el 8 de febrero de 2014, cuando la Infanta se sentaba frente al juez Castro para hacer frente a sus preguntas. Con una voz tenue, marcada por una continua carraspera y con muchas evasivas, respondía a la batería de preguntas que le realizaba el juez de instrucción. Pese a ser miembro de la junta directiva del Instituto Nóos y formar parte de la sociedad familiar Aizoon, la infanta Cristina aseguró no saber de los negocios de su marido.

"Sabía lo que hacía Iñaki (Urdangarin), pero no a lo que se dedicaba Noós", aseguró en su primer juicio. De igual manera, la Infanta reconoció haber aceptado entrar en la junta directiva de Nóos tras haber consultado a García-Revenga y al abogado personal del Rey, José Manuel Romero. Pero, pese a ello, aseguró "no haber visitado" nunca la sede del Instituto para, después, matizarlo: "Bueno, sólo una vez que fui a recoger a Iñaki".

Pero más allá de Nóos, sus mayores negativas llegaron cuando se le preguntó por Aizoon. Aseguró que no sabía que se habían cargado a la cuenta de esta empresa los gastos de su tarjeta de crédito para, después manifestar que no había asistido "a ninguna junta", pese a que el juez contaba en su poder con algunas de las actas en las que aparecía su firma. Fue entonces cuando llegaron sus evasivas.

Del "no sé" al "no me consta"

A partir de ese momento, una constante batería de"no sé", "no me acuerdo", "no me consta" o "ni idea" se sucedieron en el juicio, apoyados por algunas interrupciones de su propio abogado, Jesús María Silva, recomendándole que no contestara a algunas de las preguntas que se le realizaban. Fue entonces cuando dejó una de las frases que más se le recuerdan: "Me lo miran todo con lupa y con mayor atención precisamente por ser quien soy".

En los últimos días, Iñaki Urdangarin ha tratado de desvincularla de la trama, asegurando que sólo conocía "vagamente" los servicios que ofrecía Aizoon, además de confesar que "nunca utilizó" la tarjeta de crédito ligada a la empresa, ni tan siquiera "conocía sus claves". Ahora, es la propia Infanta la que deberá de intentar defenderse ante el tribunal.