Dónde están los 1.300 radares móviles de la DGT que vigilarán el tráfico este verano

La Dirección General de Tráfico (DGT) ha desvelado por fin la ubicación de los 1.294 radares móviles que controlarán el tráfico de las carreteras españolas -con la excepción de Cataluña y País Vasco, cuyas competencias de tráfico están transferidas a las comunidades autónomas- durante este verano. Después de varios meses de espera, la DGT ha incorporado estos dispositivos al inventario de radares fijos y de tramo, ya publicados desde hace tiempo. Esta medida permite dibujar el mapa de todos los radares en funcionamiento en España.

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Segovia, con 40, es la provincia con más radares móviles en funcionamiento. Le siguen Albacete, con 32, y Cádiz y Murcia, cada uno con 31 dispositivos. En el lado opuesto se sitúan Málaga y Huesca (29), Ourense (27) y Asturias, con tan sólo 25.

Dónde están y cuántas multas ponen los radares fijos

La inmensa mayoría de los 1.294 radares móviles gestionados por la DGT se sitúan en carreteras convencionales de doble sentido de circulación. De hecho, las diez vías con más dispositivos de este tipo son nacionales. Lidera esta clasificación la N-232, que discurre entre las provincias de Burgos y Castellón, con 35 radares móviles a lo largo de sus 600 kilómetros de longitud. La N-232 dobla en dispositivos móviles a la segunda clasificada, la N-630, más conocida como Ruta de la Plata, y que va de Gijón a Sevilla.

La información publicada por la DGT no concreta el punto kilómetro exacto donde se ubica cada radar móvil, sino el tramo de carretera en el que se sitúa. El mayor tramo afecta a la CL-629, en la provincia de Burgos: un dispositivo estará colocado entre el kilómetro 0 y el 540. Otros tramos de gran distancia son los que afectan a la N-124 (La Rioja), de 407 kilómetros, y a la CM-3109 (Ciudad Real), de 372 kilómetros. Los conductores deberán extremar al máximo la velocidad a lo largo de todos estos tramos si no quieren recibir la multa correspondiente.