Rajoy arranca el año volcado en vender la recuperación a Obama, Davos y Bruselas

Mejora en los datos de paro, fin del rescate a los bancos, prima de riesgo en mínimos y repunte del consumo. Con ese panorama, Mariano Rajoy no está dispuesto a salirse del guión que se trazó desde que alcanzó el poder y prepara un arranque de ejercicio volcado en la venta de la recuperación económica española. En casa, en el Congreso, y también en el extranjero: en Washington (con Obama), Davos, Roma y Bruselas.

En el Partido Popular dicen que en la segunda parte de la legislatura que empieza ahora será el momento de “hacer política” y preparar las próximas citas ante las urnas, las europeas de mayo para empezar. Pero hasta primeros de febrero lo que tiene el presidente del Gobierno por delante es toda una gira de promoción o road show para convencer a medio mundo de que España ha superado la crisis económica y enfila una nueva etapa de prosperidad propicia para las inversiones.

El jefe del Ejecutivo prepara un discurso básicamente económico para la reunión del comité ejecutivo del PP del próximo día 8, acudirá al Congreso a un pleno extraordinario el día 22 para explicar los avances en la unidad bancaria dentro de la UE registrados en el Consejo Europeo del 20 de diciembre. Además, el ministro de Economía, Luis de Guindos, comparecerá en la Cámara a mitad de mes para informar sobre el fin del rescate bancario.

Durante enero y hasta primeros de febrero, Rajoy hará varios viajes al extranjero para promocionar la recuperación en España. El día 13 estará en la Casa Blanca para entrevistarse con el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, y aprovechará para estar en varios foros de ese país para insistir en lo mismo. El día 23 participará, por primera vez, en el Foro Económico de Davos, en Suiza, y después se desplazará a Italia para presidir con el primer ministro Enrico Letta la cumbre bilateral hispano-italiana. A continuación, y después de visitar Turquía el 11 de febrero para entrevistarse con Recep Tayip Erdogan, participará en Bruselas en el primer Consejo Europeo del año.

“Después de dos años volcados en la política económica, con ajustes y subidas de impuestos; ahora que hay buenos datos, toca vender la recuperación, que nadie espere otra cosa de Rajoy. Es la oposición la que no quiere hablar de economía”. Así explican en fuentes del PP los más que previsibles próximos pasos del presidente del Gobierno, el primero del nuevo año en la reunión del comité ejecutivo del partido.

Los dirigentes del PP se preparan para escuchar un discurso de su jefe basado en la venta de esa recuperación económica apoyado en los últimos datos, sobre todo el de paro de diciembre, y en el llamamiento a perseverar en las reformas como la de la Administración o la aplicada al sector local, más la anunciada de todo el sistema impositivo.

No obstante, Rajoy tiene que convocar ya la convención nacional del partido y se espera que lo haga en ese comité ejecutivo para celebrarla en la primera quincena de febrero. Será el gran acto que el Partido Popular espera para lanzar la precampaña para los comicios europeos de mayo. Pero la decisión sobre la candidatura todavía puede demorarse unos días más, según apuntan en los mismos medios.

En la misma cita se espera que Rajoy aproveche para reafirmar su decisión de cumplir y hacer cumplir la Constitución y las leyes frente al desafío independentista de Artur Mas; y también que haga alguna alusión sobre el anteproyecto de reforma de la ley del aborto, pero más bien para frenar o aplazar el debate interno.

El texto que recibió el visto bueno del Consejo de Ministros a propuesta del ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, está ahora sometido a la consulta del Consejo de Estado, entre otros órganos. Además, el Tribunal Constitucional tiene pendiente (va para cuatro años) dictaminar sobre el recurso que presentó el Grupo Popular contra la llamada ley Aído vigente, que está basada en el concepto del aborto como derecho de la mujer sin tener en cuenta la protección del no nacido, se rige por el sistema de plazos e incluye la interrupción del embarazo para menores y sin conocimiento de los padres.

Las consultas y el fallo pendiente del TC permitirán al Gobierno alargar durante varios meses el siguiente paso legislativo, la aprobación del proyecto y su envío al Congreso. Es un proceso que se puede alargar hasta después de las elecciones europeas y que permitirá a los dirigentes populares perfilar mejor los detalles del texto de Gallardón que no han gustado a algunos dirigentes como Alberto Núñez Feijóo. Es el caso del tratamiento del supuesto de aborto en el supuesto de malformaciones del feto. Sobre las cuestiones de fondo (defensa del principio de defensa de la vida y supuestos en vez de plazos) en el PP aseguran que no hay debate interno.