Rajoy y Obama coinciden en el gimnasio del hotel y hablan de la visita a la Casa Blanca

El presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, y el de los Estados Unidos, Barack Obama, han tenido un encuentro informal esta mañana en el hotel de Johannesburgo donde posteriormente han acudido a los funerales de Nelson Mandela en el estadio Soccer City. Ambos han abordado la posibilidad de la visita de Rajoy a la Casa Blanca, un viaje que, aseguran fuentes oficiales, “se realizará con toda seguridad el año próximo”.

Mariano Rajoy ha viajado esta madrugada a Sudáfrica junto al Príncipe de Asturias y han llegado a Johannesburgo en torno a las siete de la mañana. La comitiva española se ha desplazado inmediatamente a su lugar de alojamiento, el lujoso Radison Blu. Rajoy, más volcado en la vida sana desde que ha dejado de fumar, decidió aprovechar el poco tiempo que la apretada agenda de los funerales de Mandela le dejaba para acudir a correr y a hacer máquinas para quemar calorías.

La sorpresa del dirigente español fue cuando se encontró en las instalaciones nada menos que al inquilino de la Casa Blanca, que había tenido la misma idea que Rajoy. Según han confirmado fuentes oficiales, ambos mandatarios aprovecharon el curioso encuentro y el lugar para conversar sobre la nunca concretada visita de Rajoy a Washington cuando ya han transcurrido dos años desde que asumiera la presidencia del Gobierno español.

Aunque las mismas fuentes aseguran que no ha salido ninguna fecha de la conversación, lo cierto es que la gira tendrá lugar “con total seguridad” el año próximo.

No es la primera vez que Rajoy aprovecha su visita al gimnasio de un hotel en un viaje oficial para mantener una charla informal con algún homólogo. Así sucedió con el primer ministro de de Finlandia, Jari Catainen. Durante una de las reuniones comunitarias en Bruselas, Catainen concedió una entrevista a un medio finés en el gimnasio del hotel. Allí estaba también Rajoy, quien incluso salía en las fotos que se publicaron en la prensa local.

El encuentro casual ha permitido un contacto que, luego, ha sido imposible, puesto que la tribuna de los funerales de Mandela donde ambos mandatarios han vuelto a coincidir estaba repleta de personalidades y el protocolo les ha colocado bastante distantes.