El alcalde de Granada: “La Junta nunca nos ha pagado el IBI de sus edificios”

Fue diputado, senador, delegado del Gobierno en Andalucía y diputado regional antes de ser elegido alcalde de Granada en 2003. Y ahí sigue, diez años después de arrebatar el bastión municipal al Gobierno tripartito (PSOE-IU-PA) de la anterior legislatura. A escasos días de cumplir los 67 años y sin ninguna intención de jubilarse (“me seguiré presentando en el 2030”), José Torres Hurtado (PP) cree, tras treinta años consecutivos encadenando cargos públicos, que los políticos deben pasar primero por los ayuntamientos antes de dar lecciones en el Congreso de los Diputados.

En un encuentro sobre 'Ciudad Futura' que El Confidencial organiza con el patrocinio de Ferrovial con los principales alcaldes de España (ya han pasado Santander, Barcelona, Vitoria, Pamplona, Málaga y Logroño), Torres aplaudió las iniciativas ya aprobadas por el Ministerio de Hacienda para superar las dificultades financieras de los ayuntamientos, como las encaminadas al pago a proveedores ("Granada ha recibido 144 millones de euros en dos ocasiones"). El primer edil granadino declaró a los responsables de este diario presentes en la reunión que es fundamental afrontar una reforma de la Administración para hacer posible el principio de “una competencia, una Administración” y que esta sea más eficaz. “El ayuntamiento de Granada se gasta nueve millones de euros en limpiar los colegios, pagar la calefacción y el mantenimiento... y las competencias son de la Junta”. El Ejecutivo regional, eternamente en manos del PSOE, debe al Consistorio 17 millones de euros, siete de ellos por el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) de los edificios que tiene en propiedad y “que nunca nos lo han pagado”.

Torres se cerró en banda a la estrategia de defensa que la dirección general de su partido mantiene en el caso Bárcenas. “Mariano Rajoy ya ha contestado en sede parlamentaria. No puede ser que todos los días estén preguntando al PP por el extesorero" y carga toda la culpa en las espaldas de la supuesta financiación ilegal de su partido a Luis Bárcenas, con quien nunca ha coincidido pese a ser un veterano en el partido: "Yo lo único que creo es que este señor ha cogido dinero usando el nombre del PP para metérselo en su bolsillo”.

El primer edil de la ciudad andaluza tampoco cree que sea un buen momento para abrir un proceso de primarias para votar a un político y no una lista cerrada, como pide su compañera madrileña Esperanza Aguirre. En este sentido, Torres arremete contra el PSOE, “el único partido que la ha tenido en el papel, pero en realidad nunca la ha aplicado”. El alcalde se refiere sin citarlo al reciente relevo en la Junta de Andalucía, donde Susana Díaz asumió las riendas de la presidencia al dimitir su antecesor, José Antonio Griñán, que también llegó a la cúspide sin pasar por las urnas cuando se apartó de la cúspide andaluza Manuel Chaves.

Granada, ciudad sostenible

El líder de los populares en la ciudad aprovechó el debate que presentó Ignacio Gastón, director general Ferrovial Servicios España, para desgranar las prioridades de su mandato: la lucha contra la crisis (“nos acogimos a dos planes de proveedores para pagar a las pymes”), generar confianza (“hay cierta perspectiva de que empiezan a verse los resultados de los ajustes”), transmitir una imagen de seriedad (“tenemos que acabar con la corrupción”) y dar respuesta a las necesidades de sus vecinos (“no vamos a tocar las aportaciones a los servicios sociales”).

Pese a la virulencia de la crisis (el presupuesto se ha reducido de 400 millones de euros en 2006 a los 260 que maneja actualmente), Torres ha duplicado sus esfuerzos en impulsar un ambicioso plan de inversión pública y se ha comprometido con sus vecinos a apostar por hacer de Granada una ciudad sostenible y eficiente (“los vecinos pueden resolver todos los trámites burocráticos con el ayuntamiento a través de Internet”), además de ser un referente cultural en España.

El mayor quebradero de cabeza para este alcalde es que los 2,2 millones de visitantes que recibe anualmente la Alhambra entren en Granada. “A la ciudad sólo llegan 400.000. Tenemos que intentar convencer a los 1,8 millones restantes de que merece la pena entrar”. Otro frente abierto es mantener acondicionado el Albaicín, el barrio con más señas de identidad granadina. “Con los recursos que recibe la Alhambra, se financia perfectamente, mientras que el Albaicín necesita muchísimo dinero para poder mantenerlo en las condiciones actuales”. Torres ha hecho de la necesidad virtud y ha incrementado el 15% el precio de las entradas a la Alhambra, que es el monumento más visitado en 2012, con cuya recaudación extra se mantienen las delicadas arcas de la Fundación Albaicín.

Conquistar Andalucía no es una utopía

Desde que estalló la crisis, los responsables de dirigir Granada han adoptado medidas de ahorro en áreas como protocolo, que ha visto desaparecer su presupuesto en los últimos años. “Hemos acabado con los gastos superfluos”. En el evento, Torres desmenuzó las singulares características de la ciudad que más turistas recibe, tras Barcelona y Madrid. Ciudad universitaria por excelencia, Granada es la ciudad más demandada para los becados Erasmus. “Este año han venido chavales de 29 países distintos”, matiza.

Al preguntarle por la responsabilidad que tienen que tener los políticos ante los ciudadanos, Torres reconoce que ha llegado la hora de que los políticos “recapacitemos” y aceptar que “no vamos por el buen camino. No podemos utilizar el Parlamento para tirarnos los trastos a la cabeza. Ahí tenemos que debatir”. De cara a las elecciones de 2015, Torres Hurtado recuerda que si algo tiene el Partido Popular es “constancia”, y no pierde la esperanza de llegar de una vez por todas al Parlamento. El nombre de su candidato para conquistar Andalucía prefiere mantenerlo en secreto, pero le manda un mensaje a su colega José Ignacio Zoido: “O alcalde de Sevilla o candidato a la presidencia de la Junta. Las dos cosas no”.