Bildu vuelve a desatar la “guerra de las banderas” en San Sebastián

Con la llegada de Bildu a las instituciones del País Vasco han vuelto a recuperarse comportamientos que habían sido arrinconados por el Gobierno del PSE, apoyado por el PP. En el Ayuntamiento de San Sebastián, presidido por el abertzale Juan Karlos Izagirre, la bandera española dejó de ondear durante todo el día de ayer por lo que parecía una cinta aislante que la ataba al mástil mientras las otras cuatro banderas se desplegaban libremente. La denuncia de socialistas y populares y la amenaza de una querella por prevaricación hizo que el “problema técnico” se solventara a última hora de la tarde.

El PSE de San Sebastián preguntó por escrito al Gobierno de Bildu si había algún "problema técnico" con el mástil de la bandera española que impedía que ésta ondease en el Ayuntamiento donostiarra “como si no estuviese colocada” y ha recordado que "el resto de mástiles" están "a las mil maravillas, sin problema”.

Con ironía, los socialistas añadían que realizaban el “aviso" porque desean "colaborar con el Gobierno Municipal, por si alguien pudiera denunciar la no presencia de alguna de las enseñas oficiales, incumpliendo la actual ley de Banderas", ya que aunque la española preside el conjunto de cinco mástiles, era la única que estaba enrollada. “Varios transeúntes se han dirigido al grupo de concejales del PSE-EE, avisando de este problema técnico que, desde nuestra responsabilidad, trasladamos al gobierno de Bildu", concluía el comunicado.

Evitar la prevaricación

El portavoz del PP en el Ayuntamiento de San Sebastián, Ramón Gómez Ugalde, fue más allá y denunciaba que la bandera de España no ondeaba “porque parece que está atada con cinta aislante”. Además, indicaba a Ep que la Policía Municipal no podía acceder al tejado del Ayuntamiento para comprobarlo, porque la comprobación sólo era posible desde una ventana del despacho de Bildu, que estaba cerrado. El  representante del PP afirmaba que el alcalde no se atrevía a quitar la bandera porque, tras una sentencia del Supremo, podía ser acusado de prevaricación, por lo que “ha decidido eliminarla de la vista de los donostiarras. Lo vamos a denunciar y podemos llegar hasta los tribunales", añadía.

Ante el cariz que tomaban los acontecimientos, y en la línea de Bildu de coquetear con la legalidad pero sin llegar, de momento, a traspasar los límites, el Gobierno municipal de San Sebastián aseguraba que "probablemente se había enrollado por la fuerza del viento" y que no había habido "nada intencionado".

Poco después, y cuando la denuncia de PSE y PP había saltado a los medios de comunicación, la bandera española volvía a ondear en el Ayuntamiento tras ser “liberada” por un técnico.