Zapatero, optimista de cara a las elecciones municipales

El jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, advirtió este domingo al PP de que, para ganar las elecciones municipales, hay que merecerlo y ha afirmado que el PSOE va a merecer esa victoria manteniendo sus señas de identidad, pese a la crisis, y haciendo una campaña en favor del empleo y lejos de todo rifirrafe.

Zapatero clausuró en Sevilla la Convención Municipal del PSOE, que durante dos días reunió a unos 2.000 alcaldes y concejales socialistas, para perfilar lo que será el programa marco del partido en las próximas elecciones locales.

A sus compañeros de partido les pidió que la campaña para las elecciones municipales y autonómicas del 22 de mayo sea ante todo a favor del empleo, pero que no se olviden de que el PSOE mantiene "intactas" sus señas de identidad en favor del Estado del bienestar, la protección social y la igualdad. Según el presidente del Gobierno, el PP carece de ideas y de programas y sólo tiene "cuatro o cinco palabras" en su discurso, que le sirven para responder a todo: "La culpa es de Zapatero".

"El PP está convencido de que va a ganar de calle las elecciones. Se les olvida sólo una cuestión, que a nosotros no se nos olvida y que yo tengo presente cada minuto: para ganar unas elecciones hay que merecerlo", subrayó.

La austeridad municipal "va a durar"

Asimismo, el presidente del Gobierno advirtió a los ayuntamientos de que la actual etapa de exigencia de ahorro y austeridad a estas instituciones "va a durar". El jefe del Ejecutivo otorgó un papel esencial a las corporaciones locales a la hora de luchar contra la crisis y el desempleo y de colaborar para lograr un nuevo modelo productivo.

Fue entonces cuando se refirió a las medidas económicas que se han puesto en marcha para hacer frente a la crisis y al hecho de que los ayuntamientos estén atravesando en la actualidad "una etapa muy exigente de ahorro y austeridad". "Y va a durar", recalcó antes de reconocer que se han hecho grandes esfuerzos para que las infraestructuras y los equipamientos de las ciudades tengan niveles muy altos. Un logro al que dijo que ha contribuido de forma decisiva el denominado "Plan E", que -entre aplausos de sus alcaldes y concejales- se ha vanagloriado de que "en dos años ha cambiado tantas cosas en ciudades y pueblos".

Con esa iniciativa, según explicó, se ha pretendido que los pueblos y ciudades sufran menos en su "tejido vital", en su "músculo" para que puedan proseguir su tarea. Si citó el empleo y el impulso de la actividad económica como sus dos primeros objetivos, situó en tercer lugar el ahorro energético, ámbito en el que ha dicho que los ayuntamientos pueden desempeñar una gran tarea.

Zapatero apeló también a ser "inflexibles" ante prácticas que puedan desembocar en una nueva burbuja inmobiliaria como la que dijo que los españoles han heredado de la política de vivienda de los gobiernos del PP y que consideró que ha sido el factor más dañino de la crisis sufrida por el país. "No hemos de caer en los errores del pasado y hay que hacer una política de vivienda y de suelo distinta de la que heredamos", pidió, y apostó por la vivienda protegida y por fomentar el mercado de alquiler y la rehabilitación de edificios.

Unas iniciativas en las que otorgó también un papel protagonista a los ayuntamientos. El presidente del Gobierno aprovechó su intervención para defender las reformas económicas que está promoviendo para reparar las "averías" que existían. En ese contexto, consideró necesarias, por ejemplo, las medidas para fortalecer las cajas de ahorro y modificar el mercado laboral, en el que consideró que la productividad ha de ser un factor esencial. Zapatero quiso lanzar un mensaje de optimismo y ha asegurado que la recuperación económica está en marcha "mal que les pese a algunos".