El PP busca una candidata que se enfrente a Cascos en la pugna por el Principado

El PP busca una mujer de consenso, con perfil moderado y preferiblemente joven para vencer al ex vicepresidente Francisco Álvarez-Cascos en su carrera hacia la presidencia del Principado de Asturias. Entre las candidatas destaca Isabel Pérez Espinosa, una concejala a las órdenes del alcalde de Oviedo, Gabino de Lorenzo. Pérez Espinosa conoce los entresijos de Cajastur, y defiende los intereses del ayuntamiento frente al pleito con los Masaveu por la ampliación del mayor parking subterráneo del centro de Oviedo.

En el segundo lugar del ranking figura Alejandra Cuétara, la diputada popular que más oposición hace al Gobierno de Vicente Álvarez Areces y, por tanto, merecedora de formar parte de las quinielas. Aunque hay quien considera que por cuestiones personales no desea tan alta responsabilidad.

Finalmente en la lista de posibles presidentas se encuentra Teresa Mallada de Castro, ingeniero de minas, con la misma formación que Gabino de Lorenzo. Conocida entre sus compañeros de partido como Maritere Mallada, ejerce de vicesecretaria Territorial del PP regional. Mallada  alaba la figura de Álvarez-Cascos y respeta a sus opositores: Pilar Fernández Pardo, al frente de la lista de Gijón, y Joaquín Aréstegui, como mandamás de Avilés. Por su parte, Pardo, amiga íntima de Dolores de Cospedal, “ha sido descartada por ser una provocación para los casquistas”, aseguran fuentes populares.

Entres los nombres que se barajan también está el de la diputada nacional Carmen Rodríguez Maniega, a quien se le reservaría la candidatura a la alcaldía de Avilés. Entretanto Génova pide que el nombre de la elegida sea desvelado en septiembre.

¿Se quedará Cascos callado?

Génova se puso en contacto con Asturias para desmentir una posible reunión con Cascos. Entretanto, la marea de adeptos al ex ministro vio suspendido el acto previsto para demostrar su apoyo a Cascos hasta nuevo aviso. “No es el momento. Se recomienda no asistir”, insistían miembros de la dirección regional. Al mismo tiempo, se acusa a Rosa Domínguez de Posada -alcaldesa afín a Cascos- de “permitir que se desprestigien a los cargos públicos del partido y hacer apología de la abstención”. Mientras, Cascos se limita a decir que “el silencio es la única respuesta cabal a una pregunta inexistente”.

En los próximos días el punto de mira se enfocará hacia la fiesta estival de los oftalmólogos oficiales del reino, los Fernández-Vega, meeting point clave para acuerdos extraoficiales. A la finca de Ceceda asistirá la crème del PP, y en la lista de invitados figura el matrimonio Cascos-Porto, Esperanza Aguirre y Rodrigo Rato, entre otros. Tras la precampaña de coqueteos, el ex ministro desveló sus aspiraciones al Principado si los órganos del partido así lo acordaban. Además, envió una indirecta al alcalde de Oviedo: “La calumnia más perversa es la de relacionar mi silencio sobre hipotéticas propuestas que ningún órgano estatutario ha tratado”, recalcó recientemente en Valencia de Don Juan.

El regidor ovetense le respondió comparando la lucha por el poder asturiano con la carrera política americana entre Hillary Clinton y Barack Obama. Los casquistas interpretan estas palabras como un acercamiento para trabajar codo con codo.

Ante el dilema, Cascos no tira la toalla: “En mi caso todo es revisable. Es la hora del Partido Popular, de Mariano Rajoy y de su equipo, y aquí estamos para tirar del carro con ambas manos”, asegura.