Los impuestos suben el tono de las intervenciones en la sesión de control del Congreso

Se sabía que iba a traer cola. La subida de impuestos acometida por el Gobierno esta semana se presuponía como el centro de la polémica en la sesión del Control en la jornada de hoy, y así ha sido. Unos y otros, populares y socialistas, se han enredado en una retahíla de acusaciones y calificaciones mutuas que sólo han aportado más de lo mismo, entre crisis y datos negativos.

El principal argumento esgrimido por el PP ha sido la "mentira" que según ellos lanzó el gobierno en forma de "brotes verdes" justo antes de las elecciones europeas del 7 de junio. Soraya Sáenz de Santamaría ha sostenido que el Gobierno "mintió" durante la campaña electoral al anunciar "la recuperación del país" mientras "redactaba en secreto una subida de impuestos".

Tras insistir en que el Gobierno esperó a que se cerraran las urnas "para avisarles de la mala noticia" a los ciudadanos, la portavoz popular ha dicho al PSOE que el único culpable de su "derrota electoral" en las europeas es el PP por su victoria en los comicios. "No es la primera vez que mienten antes de unas elecciones (...). Se ha convertido en una costumbre para ustedes", se ha quejado Sáenz de Santamaría, antes de enfatizar que en esta ocasión "su osadía ha ido más lejos", porque el Gobierno pretende que los ciudadanos "paguen con sus impuestos la incapacidad" del Ejecutivo para hacer frente a la crisis.

A la intervención de Santamaría ha replicado la vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega, indicando que el Ejecutivo de Zapatero "siempre mira la realidad de frente", en tanto que en el PP "siempre miran hacia otro lado y de reojo a urnas, porque su única visión es esa, la del botín electoral". Asimismo, De la Vega ha argumentado que los datos macroeconómicos facilitados el viernes están contrastados, y en ese sentido, ha hablado Zapatero en la intervención inicial de la sesión, en la que ha insitido en que lo más duro de la crisis ha pasado.

Antes, Zapatero ha tenido que enfrentarse a las duras críticas del líder popualr Mariano Rajoy, quien directamente, y como su compañera Santamaría ha acusado al presidente de ocultar la subida de impuestos sobre el tabaco y los hidrocarburos, así como las previones negativas de la economía, justo "cindo días antes" de los comicios europeos. "¿Ahora que no hay elecciones van a decir la verdad?", ha espetado el líder popular al jefe del Ejecutivo.

"Lo peor de la crisis ya ha pasado"

Para defenderse, Zapatero se ha basado en los datos de la presión fiscal actualmente en España, que es del 32,8% del PIB, "la más baja desde 1995", frente al 34,5% del PIB que había cuando el PP dejó el poder. Así, el presidente ha insistido en que "lo más duro de la crisis ha pasado ya" y que la recuperación se irá produciendo progresivamente, de manera más intensa en 2010, hasta llegar a 2011 con un crecimiento positivo.

Zapatero ha ironizado al decir que cuando el PP subía los impuestos decía que se trataba de una actualización y no de un incremento, y ya en tono más serio, ha acusado al líder popular de demagogia y falta de seriedad por no reconocer que la menor presión fiscal actual se debe al descenso de impuestos y no, como dice el PP, al descenso de la actividad y a la menor recaudación.

Por su parte, Rajoy ha criticado al Ejecutivo por la falsedad de sus previsiones y el hecho de que fueran modificadas cinco días después de las elecciones europeas, en las que hablaron de brotes verdes, "un engaño más", y afirmó que la última subida de impuestos ha sido una "bofetada" a las clases medias y bajas, lo que, en su opinión, retrasará la recuperación y provocará más paro. A este respecto, el presidente ha señalado que no sólo el Gobierno español ha cambiado sus previsiones, sino que también el FMI y la Unión Europea las han modificado "cinco veces", por lo que, añadió, "también serán mentirosos compulsivos como usted dice que somos nosotros".

Chaves defiende a su hija

El vicepresidente tercero del Gobierno y ministro de Política Territorial, Manuel Chaves, insistió hoy en la legalidad de las subvenciones concedidas a la empresa Matsa cuando era presidente de la Junta de Andalucía y defendió el derecho de su hija a trabajar sin tener que abandonar su comunidad autónoma por el puesto que ocupa su padre, tras lo que acusó al PP de "engañar, manipular y crear una gran mentira".

Chaves volvió a enfrentarse en el Pleno del Congreso a las acusaciones de favorecer a la empresa Matsa, donde trabaja su hija Paula Chaves, defendió que "no se ha podido demostrar nada". "Mi hija no participó desde la solicitud hasta la aprobación de ese incentivo", aseguró. "¿Mi hija trabaja en un departamento jurídico?, claro que sí -subrayó el ministro-. Tiene todo el derecho a trabajar, no se tiene que ir fuera de Andalucía para buscar trabajo. Están engañando, haciendo una manipulación y creando una gran mentira".

En este sentido, explicó que la Agencia de Innovación de Andalucía es la que concede incentivos a 2.141 proyectos, por lo que las ayudas no dependían personalmente de él como presidente de la Junta. Además, apuntó que las subvenciones recibidas por Matsa no son las de mayor cuantía ni atienden a otros baremos que no sean los estipulados legalmente.

El diputado del PP Juan José Matarí advirtió a Chaves de que ganar elecciones "no da derecho a abusar del poder, no concede impunidad ni permite mentir" y emplazó a "dar cuentas y responder" de su gestión ante el Parlamento. "Quiere impedir la investigación y no dar explicaciones sobre las manifiestas irregularidades concediendo diez millones de euros a la empresa de su hija", censuró.

De esta forma, le acusó de "mentir a sabiendas" y aseguró que Paula Chaves sí participó en la solicitud y aprobación de la subvención como responsable del departamento jurídico de Matsa, que tiene entre sus responsabilidades "la gestión y tramitación de incentivos y ayudas". "Todo lo dicho es una auténtica media verdad, está mintiendo", respondió Chaves.