Descubren a un barco marroquí pescando con redes ilegales en aguas protegidas españolas

La organización para la conservación marina internacional detectó hace días a nueve millas al Este de la isla de Alborán un pesquero marroquí que procedía al calado de una red de deriva ilegal, de más de cinco kilómetros de longitud, en el interior de aguas españolas y de la Reserva de pesca de Alborán. El catamarán de investigación Oceana Ranger fue quien detectó el pesquero a las siete de la tarde del pasado jueves.

Lejos de ser un caso aislado, lo cierto es que la incursión de pesqueros marroquíes en aguas españolas es bastante habitual. Según ha podido saber El Confidencial, miembros de Oceana llevan tiempo vigilando la zona y no es la primera vez que han podido ver al pesquero recientemente interceptado campando a sus anchas.

María José Cornax, miembro de la organización internacional aseguró que esto ha pasado en más ocasiones. “Es muy habitual verle entre aguas españolas y marroquíes, va y viene, pero es ahora cuando se le ha identificado. Juega con la cercanía y los límites entre las aguas de ambos países. Cuando observan que pueden ser vigilados y denunciados regresan a aguas marroquíes y ahí nosotros ya no podemos hacer nada”.

El marco legal no recoge castigos más allá de la expulsión del barco y una multa. En este caso tampoco se ha tomado ninguna medida adicional. Según Cornax, otro pesquero marroquí fue interceptado en el mes de mayo. A bordo llevaba 150 kilos de pez espada. “El barco fue conducido al puerto de Almería, se le impuso una multa y ya está”. Ante la ausencia de medidas más duras, los pesqueros continúan violando las leyes de pesca, tanto en lo que se refiere a la captura en zonas protegidas o prohibidas, como al uso de redes ilegales.

El Oceana Ranger se encontraba en la zona documentando los fondos marinos profundos con la ayuda de un robot submarino (ROV), con el fin de contribuir con esa información a las medidas de conservación y estudio de los ecosistemas de la Reserva, cuando detectó al pesquero marroquí

La tripulación del catamarán puso rumbo al pesquero y al acercarse al mismo pudo comprobar cómo, junto a la red, dispuesta en forma de cortina de unos treinta metros de alto, nadaban dos grupos de varias decenas de delfines mulares y comunes, que se encontraban en serio peligro de enmallar en la misma.

Ante la gravedad de la situación, los miembros de Oceana tomaron abundante documentación grafica y se pusieron en contacto telefónico y por radio con la Secretaria General de Pesca del Ministerio de Agricultura, la Comandancia de la Guardia Civil en Almería y el Destacamento militar de la Isla de Alborán. También lo intentaron, sin éxito, con la Junta de Andalucía, que a esa hora de la tarde no respondía a ninguna llamada.

La patrullera del MAPA “Riscos de Famara”, asignada a la vigilancia de la Reserva de Alborán, respondió inmediatamente a la llamada por radio del Oceana Ranger, mientras estaba ocupada en retirar otros artes de pesca calados ilegalmente en el recinto de la Reserva. Tan pronto como finalizaron las tareas, la patrullera puso rumbo al lugar que le indicaba Oceana, y se encontró con el pesquero marroquí todavía en plena faena de calar la red de deriva, unas dos horas después de que el Ranger le hubiese localizado por primera vez. La “Riscos de Famara” se limitó a informar al pesquero de que se encontraba en aguas territoriales españolas protegidas, y le solicitó que recogiera la red y abandonase la zona.

Incumplimientos reincidentes