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La furgoneta entró en el aeropuerto de Barajas poco después de que Zapatero declarara su optimismo sobre el fin de ETA
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La furgoneta entró en el aeropuerto de Barajas poco después de que Zapatero declarara su optimismo sobre el fin de ETA

Las grabaciones del aparcamiento ‘inteligente’ del aeropuerto de Madrid, convertido ahora en escombros, no dejan lugar a dudas. La furgoneta bomba entró en el edificio con

Foto: La furgoneta entró en el aeropuerto de Barajas poco después de que Zapatero declarara su optimismo sobre el fin de ETA
La furgoneta entró en el aeropuerto de Barajas poco después de que Zapatero declarara su optimismo sobre el fin de ETA

Las grabaciones del aparcamiento ‘inteligente’ del aeropuerto de Madrid, convertido ahora en escombros, no dejan lugar a dudas. La furgoneta bomba entró en el edificio con su carga mortal el día 29 de diciembre a las 18:51 horas. Cinco horas y veinte minutos antes, a las 12:30 de ese mismo día, José Luis Rodríguez Zapatero iniciaba en La Moncloa la rueda de prensa en la que declaró su optimismo sobre el fin de ETA y prometió que “dentro de un año estaremos mejor”.

La hora exacta de la entrada de la bomba en el aparcamiento de la Terminal 4 de Barajas fue revelada ayer por el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien en rueda de prensa se negó a ahondar en las razones por las que el presidente había basado su optimismo y se remitió a las explicaciones que Zapatero realizó en la jornada del atentado, el pasado 30 de diciembre.

El presidente optó ayer por continuar con su familia en Doñana, en lugar de regresar a La Moncloa para gestionar la crisis surgida con este atentado que ha costado la vida de dos jóvenes ecuatorianos. Zapatero delegó en Rubalcaba la realización de las declaraciones públicas en nombre del Ejecutivo. Allí recibió la llamada de apoyo del presidente francés, Jacques Chirac, quien condenó “firmemente el atentado” y expresó la voluntad de su país de colaborar “plenamente” con España en la lucha contra el terrorismo.

“El proceso está roto, liquidado y acabado”

Rubalcaba fue ayer el primer miembro del Gobierno en dar oficialmente por “roto, liquidado y acabado” el ‘proceso de paz’ abierto por Zapatero con la tregua de ETA del 22 de marzo. El ministro pidió al PP zanjar la polémica suscitada tras el atentado con el fin de "empezar a trabajar juntos" para acabar con la violencia en España. Dirigiéndose al responsable 'popular' de Interior, Ignacio Astarloa, Rubalcaba se preguntó: "¿Quiere que digamos si el proceso de paz se ha roto? Bien, evidentemente se ha roto. ¿Que se ha liquidado? Está liquidado y, evidentemente, está acabado. ETA ha sido quien ha roto, ha liquidado y acabado el proceso de paz".

El Gobierno ha dado un giro y ha decidido dar por cerrado el ‘Proceso’, pero el PP exige que sea el propio Zapatero quien lo declare en público. Este giro comenzó ayer, cuando el periódico El País reveló en primera página que el presidente “da por liquidado el proceso de paz”. Además, el secretario de Organización del PSOE, José Blanco, sostuvo el martes que la banda terrorista lo había “roto” y proclamó la intención socialista de buscar una estrategia compartida con el resto de los partidos.

Rubalcaba defendió que esa ruptura la había anunciado el propio Zapatero en su rueda de prensa del sábado 30 de diciembre. Pero en esa comparecencia el presidente habló de “suspender” el diálogo con la banda y eludió hasta en tres ocasiones el reconocer tal cierre.

Críticas a Astarloa

El ministro reprochó a Astarloa que dedicara ayer 16 minutos a criticar al Gobierno y sólo minuto y medio para referirse a ETA. Hábil político, Rubalcaba puso el dedo en la llaga ante esta nueva fase: si el PP estará con el Gobierno y con el resto de los partidos ante el camino abierto con el atentado o aprovechará la ocasión para arremeter contra el Zapatero y el PSOE.

La actitud radical de Astarloa de ayer sugiere que el PP atacará a los socialistas, a pesar de que su líder Mariano Rajoy declarara el día del atentado que Zapatero es el presidente del su país y a pesar también de que el portavoz del PP en el Parlamento vasco, Leopoldo Barreda, responsabilizara a ETA y no al Gobierno.

Las grabaciones del aparcamiento ‘inteligente’ del aeropuerto de Madrid, convertido ahora en escombros, no dejan lugar a dudas. La furgoneta bomba entró en el edificio con su carga mortal el día 29 de diciembre a las 18:51 horas. Cinco horas y veinte minutos antes, a las 12:30 de ese mismo día, José Luis Rodríguez Zapatero iniciaba en La Moncloa la rueda de prensa en la que declaró su optimismo sobre el fin de ETA y prometió que “dentro de un año estaremos mejor”.