Riquelme ficha a ricos mexicanos para su nuevo consejo de CoxAbengoa

Enrique Riquelme se ha rodeado de un equipo de notables del sector financiero y de las renovables para relanzar el proyecto de CoxAbengoa. El empresario alicantino ha propuesto a Alberto Zardoya, Arturo Saval, Luis Arizaga, Elena Sánchez y Alberto Fernández como miembros del consejo de administración de la nueva sociedad resultante de la fusión de Cox Energía y la antigua empresa andaluza de ingeniería. Un órgano de gobierno para respaldar la administración y la reputación de una sociedad que pretende sacar al Mercado Continuo el próximo año.

Según aseguran fuentes del sector, Riquelme ha convencido a varios expertos financieros mexicanos para que formen parte de la nueva CoxAbengoa, que el presidente del grupo presentó en sociedad a finales del pasado mes de septiembre. En aquella primera aparición en público, de la mano de Nacho Moreno, el expresidente de Credit Suisse España, como consejero delegado, la imagen con las sillas del consejo de administración aparecía vacía, sin identificar sus futuros titulares. Solo dijeron que serían ejecutivos del más alto nivel en sus especialidades.

Tres meses después, Riquelme ha recibido el apoyo de Alberto Zardoya, uno de los herederos de la empresa de ascensores Zardoya Otis y socio en Cox Energy, que ha decidido entrar en el consejo como dominical. También se suman al proyecto Arturo Saval, presidente de Nexxus Energia, uno de los grandes fondos de renovables, que gestiona dinero de grandes fortunas mexicanas. De este país latinoamericano procede, asimismo, Luis Arizaga, socio de Exus Management Partners y exdirectivo del fondo australiano Macquarie. El trío de consejeros mexicanos lo cierra Juan Ignacio Casanueva, presidente de Interprotección, el mayor bróker de seguros de Latinoamérica.

Al órgano de gobierno de CoxAbengoa se une Elena Sánchez, experta en asuntos públicos, expresidenta de Sigma Dos y asesora política, así como Alejandro Fernández, ex consejero delegado de la constructora madrileña Aldesa. El secretario del consejo será Antonio Medina, responsable del bufete MedinaCuadros, muy próximo a Isidro Fainé y Florentino Pérez.

Riquelme ha convencido a varios expertos financieros mexicanos para que formen parte de la nueva CoxAbengoa

Una vez reducida la deuda a cero desde los 6.000 millones de pasivo que la llevaron a la quiebra, el plan estratégico de la nueva CoxAbengoa prevé un ebitda de 65 millones este año en el negocio de energía, cifra que se duplicará el próximo ejercicio. Un crecimiento que principalmente vendrá de Latinoamérica, lo que explica la presencia de los tres nuevos consejeros procedentes de México. Además, Riquelme y Moreno confían en cerrar el ejercicio con una facturación de unos 800 millones gracias a que la compañía, una vez obtenidos los avales, ha podido multiplicar los concursos a los que se ha presentado para conseguir contratos.

Negociación con la banca

No obstante, la hoja de ruta, que divide el grupo en cinco divisiones (energía, agua, infraestructura, servicios y tecnología), requiere del apoyo de la banca, que salió muy escaldada de la anterior etapa. Riquelme y Moreno se han reunido con numerosas entidades financieras en los últimos meses para lograr el respaldo a su hoja de ruta. El nombramiento de este consejo era una de las condiciones exigidas por la banca para abrir de nuevo el grifo del crédito a Abengoa.

Riquelme y Moreno se han reunido con numerosas entidades financieras en los últimos meses para lograr el respaldo a su hoja de ruta

El presidente y el consejero delegado del nuevo grupo han preparado varias operaciones financieras. La primera de ellas es una ampliación de capital de unos 100 millones de euros en CoxAbengoa Energía, la sociedad que actualmente cotiza en el BME Growth, la bolsa para empresas en desarrollo. Con la venta de nuevas acciones, Riquelme pretende lograr liquidez adicional para la compañía y el free float suficiente para que la empresa pueda saltar al Mercado Continuo, la bolsa para sociedades de un tamaño considerable. Esta unidad será el negocio central del grupo, con una aportación al ebitda de 116 millones en 2024 y de 431 millones en 2027, según sus proyecciones.

Según explicaron en septiembre, el empresario de Alicante y el ex número uno de Credit Suisse en España aseguran tener negociaciones avanzadas con dos fondos de capital riesgo para que entren en la división de agua y en la de infraestructuras. En la primera es en la que Riquelme y Moreno ven más valor —el grupo cuenta con tres concesiones— y crecimiento futuro, al tratarse de "un bien escaso, como se está demostrando con los episodios de sequía que estamos viviendo". En sus proyecciones, Water, que va a estar dirigida por Miguel Ángel Fernández, fichado de Cobra (Vinci-ACS), pasará de un ebitda de 35 millones en 2024 a 99 millones en 2027.

El mismo esquema quieren aplicar a la subsidiaria de infraestructuras, una inversión que ahora está muy condicionada por el aumento de los tipos de interés, que le resta atractivo y rentabilidad. En total, CoxAbengoa prevé en su plan estratégico alcanzar una facturación de 3.000 millones dentro de cuatro años y un beneficio operativo de 609 millones, lo que podría elevar la valoración del nuevo grupo hasta los 4.000 millones, si se toman como referencia los múltiplos de compañías del sector.