Empresas chinas piden a sus trabajadores que cojan el saco y duerman allí para evitar los cierres

Durante los últimos dos meses, China ha visto peligrar su política de cero covid. Ahora, se enfrenta al peor brote de coronavirus desde comienzos de 2020 en Wuhan. Una situación que ha despertado los temores de los centros manufactureros y tecnológicos del sur de China en torno a una cadena de suministros que aún no se ha recuperado de las disrupciones.

Pese a las restricciones, algunas fábricas han conseguido permisos especiales para seguir operando, siempre que lo hagan en grupos burbuja y no salgan de las instalaciones. En Shanghái, los confinamientos anunciados por la ciudad para este lunes han llevado a algunos bancos y gestoras de activos a pedir a sus trabajadores que se queden dentro de las oficinas durante varios días para mantenerse operativos mientras tanto.

Muchas incluso les han pedido que se preparen para dormir en las oficinas, y una gestora ha llegado a ofrecer 2000 yuanes (unos 286 euros al cambio) por acampar una noche entre semana y hasta 4000 en fin de semana, según ha confirmado una fuente a la agencia de noticias Bloomberg.

La ciudad, de 25 millones de habitantes, se encuentra confinada para realizar un cribado masivo en dos fases. Para ello se suspenderán el transporte público, los traslados por carretera, así como se impedirá a los residentes abandonar sus hogares. Además, en la primera fase del confinamiento, quedarán bloqueadas tanto la bolsa de Shanghai, como el distrito de Pudong, sede de muchas instituciones financieras nacionales e internacionales.

Según el Financial Times, algunos trabajadores han optado por quedarse a dormir en sus empresas para asegurarse llegar a sus turnos y seguir recibiendo sus salarios. Una situación que ha llamado la atención entre los usuarios chinos de Internet, tras publicarse fotos de las tiendas de uno de los proveedores de Apple, Dongguan Fuqiang Electronic. “Dormimos en la planta con trozos de cartón a modo de colchones” durante seis días, explicó una de las trabajadores de la firma taiwanesa al diario británico.

El país liderado por Xi Jinping se enfrenta a una nueva oleada de coronavirus atribuida a la variante ómicron. Desde el inicio de la pandemia, según las cifras oficiales de la Comisión Nacional de Sanidad, ya son más de 145.000 los contagiados por la covid-19. Shanghái destaca por ser uno de los lugares con más contagiados y, sobre todo, con más cifras de asintomáticos.