Brunswick sacude la consultoría de comunicación con su entrada en España

El próximo 2022 comenzará fuerte en el competido negocio de la consultoría de comunicación. El gigante internacional Brunswick abrirá delegación en España a lo largo del primer trimestre del año que viene, tal y como han confirmado fuentes próximas a la compañía británica.

Hasta el pasado mes de septiembre, la estructura de la multinacional para el mercado español se repartía entre dos socios. Rurik Ingram es el ‘senior partner’ que gestiona la Península desde Lisboa, mientras que Stuart Donnelly cubre los grandes clientes de España desde Londres.

Este modelo se ha ampliado con dos perfiles locales. Fiona Maharg-Bravo, editorialista de Reuters-Breakingviews y ex 'dircom' de Telefónica Internacional, fichó en septiembre para operar desde Madrid, sumándose así a Pilar Teixeira, periodista y con una década en ING, 'senior advisor' desde hace dos años.

Hasta el pasado mes de septiembre, la estructura de la multinacional para el mercado español se repartía entre dos socios

Brunswick, la agencia de comunicación de referencia en asuntos críticos, asesora a grandes empresas e inversores en todo lo referente a comunicación financiera y relaciones con inversores, asuntos públicos, activistas, cambios de estrategia, digital y redes sociales…

Cuenta con más de 1.200 empleados y expertos por sectores y geografías, lleva 20 años trabajando en España aunque nunca con estructura local. Ese hándicap lo resolvió inicialmente con una alianza con la española Estudio de Comunicación, aunque con el paso del tiempo ha trabajado con otras firmas.

Consolidación sectorial

Al contrario que otros competidores, como la también británica Finsbury, el otro referente en ese segmento, Brunswick ha renunciado a crecer en nuevos mercados vía adquisiciones o fusiones, aunque ha tenido oportunidades, como demuestra la reciente fusión de su rival con Sard Verbinnen.

En el mercado doméstico, la actividad también es frenética. Hace solo unos meses, la firma líder LLYC dio el salto a bolsa y protagoniza el proceso de consolidación del sector, aunque la sofisticación del servicio de asuntos públicos ha alumbrado el nacimiento de firmas como Acento o Harmon.