Prisa despide a Antonio Caño, exdirector de 'El País'

Prisa, la empresa editora del diario 'El País', ha despedido al exdirector del periódico Antonio Caño, según ha podido confirmar El Confidencial. La decisión ha sido comunicada al propio Caño a través de una llamada de la directora de Gestión de Talento de la compañía y es irrevocable.

La baja de Caño, que actualmente ejercía de asesor digital de 'El País', causa efecto inmediato, aunque el periodista está dispuesto a iniciar acciones legales contra la compañía. Fuentes internas de Prisa alegan que el despido se ha producido por "causas organizativas", ya que el periódico ha creado una estructura diferente.

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Caño fue director de 'El País' entre 2014 y 2018, una etapa en la que el diario referente de la socialdemocracia en España fue duramente criticado por su acercamiento a posiciones políticas más conservadoras mientras el PP ocupaba la Moncloa.

En junio de 2018, el veterano periodista, de 64 años, fue sustituido por Soledad Gallego-Díaz al frente de la cabecera de Prisa, un hecho que coincidió con la llegada del PSOE de Pedro Sánchez a la presidencia del Gobierno.

Actualmente, Caño seguía colaborando con 'El País' como articulista, tras 39 años de trabajo en el periódico. Al igual que en su etapa como director, se ha mostrado muy crítico con el presidente del Ejecutivo en sus tribunas mensuales.

Caño: "Es un despido ilegal"

Tras conocerse el despido, el exdirector de 'El País' ha colgado un comunicado en su cuenta de la red social Twitter en el que expresa "la incomprensión y el dolor" que siente ante una decisión que califica de "fulminante", y denuncia que no se le ha dado la posibilidad de intercambiar puntos de vista con los responsables del diario.

Caño atribuye el cese a la tribuna titulada 'Algunas lecciones para la izquierda', que no fue publicada en la versión de papel por decisión del director del periódico. Era la segunda vez, argumenta el periodista, que se dejaba de publicar un artículo suyo crítico con el Gobierno. "Solo puedo entender que mis problemas de los últimos tres años están derivados de la situación de la política española", añade. Y concluye: "Es un despido por razones ideológicas, ilegal y sin precedentes".