Cinco fases en las que pymes y autónomos necesitan dinero (y cómo conseguirlo)

España cuenta con 3.253.670 autónomos y 3.276.794 pymes de entre 0 y 200 empleados, y todas ellas se tienen que enfrentar a una serie de retos para salir adelante: encontrar una idea, validar el modelo de negocio, hacer un estudio de mercado, analizar a la competencia, conseguir clientes... y, por supuesto, uno de los factores más esenciales: conseguir financiación.

La mejor forma de tener financiación es conseguir clientes, pero hay momentos en los que, con clientes o sin ellos, las pymes y autónomos de nuestro país necesitan inyecciones financieras puntuales. Y es entonces cuando los emprendedores tienen que dejar a un lado el trabajo puro y duro para ponerse a buscar esa inyección.

Los momentos en que necesitan financiación

Ya sea en los inicios, en los periodos de confirmación o en los de crecimiento, siempre hay diversas etapas en las que autónomos y pymes necesitan un apoyo financiero externo.

1.- Constitución de la empresa

Según los datos del Instituto Nacional de Estadística, el pasado mes de agosto nacieron 5.871 nuevas empresas en España. A cualquier emprendedor le gustaría montar una empresa que pueda autofinanciarse con su actividad desde el primer momento, pero a la hora de la verdad esta circunstancia no se da casi nunca.

Por otro lado, según el Mapa del Emprendimiento 2017, elaborado por Spain Startup, el 1,5% de los nuevos emprendedores procedía del paro, el 10% era estudiante y el 57% trabajaba por cuenta ajena, con lo que es evidente que la mayoría de ellos no cuenta con grandes cantidades económicas para empezar. De hecho, el 57% de los emprendedores no tiene financiación externa al montar su empresa, con lo que tiene que desarrollarla con sus propios recursos.

2.- Comprar o ampliar activos

Quizá exageramos cuando compramos el relato de que la empresa media nace en un garaje, pero la realidad no es muy distinta, ya que, en su origen, cualquier empresa intenta gastar la menor cantidad de dinero posible y suele empezar en una sede muy sencilla y con un equipamiento igualmente modesto.

No obstante, si todo va bien, la pyme o el autónomo en cuestión necesitarán reforzar estos aspectos de la compañía y ampliar sus activos o incluso comprar los que tienen alquilados. Y para ello acabarán necesitando, de nuevo, financiación externa.

3.- Creación de empleo

Las pymes son un puntal imprescindible dentro del empleo creado en España. Según los datos del Ministerio de Trabajo, las empresas menores de 250 empleados generan el 66,5% de los nuevos empleos en nuestro país. Estos datos son aún más evidentes en el caso de los autónomos (13%) y las microempresas (19,2%), que asumen, en total, el 32,2% de estos nuevos puestos de trabajo.

Sin embargo, esos empleos no siempre se crean cuando hay un excedente de caja: pueden generarse ante un aumento del volumen de la actividad, ante la llegada de un gran cliente (que tardará en pagar) o ante una apuesta de futuro, con lo que el emprendedor tendrá que recurrir a financiación procedente de fuera.

4.- Crecimiento y nuevos negocios

En el sector de las 'startups' hay un término que cada vez se ha extendido más al ámbito empresarial en su conjunto: el producto viable mínimo (MVP, por sus siglas en inglés), que define el producto o servicio básico que la pyme ofrece a sus clientes para empezar y que, poco a poco, va mejorando.

Por ello, son muchas las empresas que, si han empezado de forma modesta su actividad, con el tiempo van mejorando sus servicios, aumentándolos o incluso creando nuevas líneas de negocio, con lo que la inyección económica, proceda de donde proceda, se hará necesaria.

5.- Internacionalización

El volumen de pymes españolas que deciden coger la maleta e internacionalizarse se mantiene medianamente estable en los últimos años: a día de hoy 149.268 empresas consiguen hacerlo, según el Perfil de la Empresa Exportadora Española elaborado por el ICEX.

¿Podría haber más? Lo cierto es que las condiciones no son nada sencillas, tal y como evidencia un estudio elaborado por cinco bancos europeos de promoción nacional (Bpifrance, British Business Bank, CDP, ICO y KfW): el mayor obstáculo al que se enfrentan las pymes españolas a la hora de internacionalizarse es precisamente el acceso a la financiación.

¿Cómo conseguir el dinero?

La necesidad de financiación está clara, pero, ¿dónde pueden encontrar las pymes y autónomos esa inyección financiera? Los bancos no parecen la mejor opción: según el Informe de Estabilidad Financiera, elaborado por el Banco de España, el 67% de las pymes que acuden al banco en busca de financiación reciben una respuesta negativa.

Es por esto que existen otras alternativas como ConAvalSí, que ayuda a las pymes y autónomos a conseguir apoyo financiero en tres tareas esenciales:

• Financiación. Consiguiendo el aval para facilitar el acceso a la financiación
• Condiciones. Negociando, a través de dicho aval, los plazos y tipos de interés idóneos con la entidad bancaria
• Asesoramiento. Merced a un grupo de expertos dispuestos a asesorar a la pyme y el autónomo durante todo el proceso de financiación

Las SGR (Sociedades de Garantía Recíproca), a través de esta plataforma, facilitan a pymes y autónomos el acceso a la financiación a través de la concesión de avales directos y, además, apoyan sus proyectos con asesoramiento, formación financiera y promoción empresarial de calidad.

Además, la plataforma de ConAvalSí no solo permite el acceso a apoyo financiero, sino también técnico, para aquellas pymes o autónomos que quieran garantizar compromisos no dinerarios relacionados con su actividad ante la Administración o terceras entidades. Para ello, los interesados cuentan con un amplio abanico de SGR, distribuidas por toda la geografía nacional.