Sale a subasta (y a precio de saldo) la última joya del imperio de Baluarte

Baluarte, la otrora gran inmobiliaria de viviendas de lujo, está a punto de perder el último símbolo de su pasado esplendor. Se trata del edificio de oficinas ubicado en los números 6 y 8 de la Cuesta del Sagrado Corazón, justo a la entrada del barrio de Chamartín, donde antiguamente se ubicaba el domicilio social de la promotora de la familia Zapata y que actualmente está arrendado al Grupo Auriga.

El pasado 14 de febrero, el Juzgado de Primera Instancia número 31 de Madrid falló sacar a subasta el inmueble, tasado en 9,5 millones de euros, para hacer frente a la ejecución hipotecaria dictada a instancia de Alta Gestión de Activos, sociedad que reclama una deuda de 4,7 millones de euros a Altavida, la compañía propietaria del inmueble y que también forma parte del conglomerado inmobiliario de los Zapata.

La Justicia ha ordenado sacar a subasta el edificio tras una ejecución hipotecaria dictada a instancia de un acreedor que le reclama 4,7 millones de euros

Esta saga fundó Viviendas Baluarte hace 14 años tras la escisión de la antigua Nuevo Mundo y también está en el accionariado de Altavida, sociedad que puso este edificio de oficinas como garantía de un préstamo de 13 millones de Banco Sabadell.

No obstante, el origen de esta deuda se encuentra en la propia Baluarte, ya que esta empresa es la titular del préstamo, aunque Altavida accedió a ceder como inmueble hipotecado el inmueble de la Cuesta del Sagrado Corazón.

Con una superficie total construida de 1.668 metros cuadrados, el edificio cuenta con un sótano dedicado a garaje; una planta baja de acceso, oficinas y elementos comunes; dos plantas en altura para oficinas; y una cubierta dedicada a instalaciones.

La subasta de este edificio se hizo pública el pasado fin de semana, con motivo de su publicación en el BOE -Boletín Oficial del Estado-, justo un día después de que Viviendas Baluarte volviera a aparecer en la lista de los mayores morosos de Hacienda, al acreditar la Agencia Tributaria que arrastra una deuda con las arcas públicas de 13 millones de euros.

Sin embargo, como ocurre con gran parte de los miembros de esta lista negra, la cartera dirigida por Cristóbal Montoro tiene muy difícil poder recuperar este dinero, ya que la compañía se declaró en concurso hace más de cuatro años y apenas un año después inició su fase de liquidación.

Precisamente, fue justo un mes antes de que iniciara el procedimiento concursal cuando Viviendas Baluarte registró el traslado de su domicilio social de la Cuesta del Sagrado Corazón a la calle Alcalá 121, donde también se encuentran las oficinas de Altavida.