Madrid y Cataluña acapararán la mayor parte de la bonificación fiscal a la factura del gas

La rebaja del IVA en el recibo del gas del 21% al 5%, que entra en vigor este sábado, tendrá un efecto territorial desigual. La Comunidad de Madrid y Cataluña acapararán cerca de la mitad de toda la bonificación, que el Ministerio de Hacienda calcula entre 190 y 200 millones de euros.

Es decir, que los territorios gobernados por PP y ERC, respectivamente, pagarán casi 100 millones de euros menos por este impuesto indirecto desde hoy hasta que termine el año.

A diferencia de la electricidad, el uso del gas natural está mucho más concentrado en los territorios fríos y de interior. Además, existen comunidades donde hay más penetración de gas natural en los hogares que en otras. Por eso, la medida anunciada hace un mes por el Gobierno beneficiará de forma distinta por territorios.

Según los datos que publica Cores, en los meses de octubre, noviembre y diciembre de 2021 en España se consumieron más de 23.000 GWh con una presión de menos de cuatro bares, el destinado al uso doméstico. De los mismos, Madrid consumió unos 6.000 GWh mientras que Cataluña gastó más de 5.800 GWh.

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La situación es opuesta a la de otras comunidades muy pobladas y cálidas que utilizan mucho menos gas como Andalucía, que consumió en los últimos tres meses de 2021 menos de 1.000 GWh, o la Comunidad Valenciana, que gastó alrededor de 1.200 GWh en dicho periodo y que ahora aprovecharán menos la bonificación. La medida, por ejemplo, tiene un efecto nulo sobre Canarias, donde no se usa gas natural en los hogares.

No obstante lo anterior, hay territorios con alta penetración del gas natural a nivel doméstico, cuyos habitantes aún se beneficiarán más de esta medida. En relación con la población, los consumidores navarros, riojanos y castellano y leoneses serán los más beneficiados por la medida junto con madrileños y catalanes.

Es decir, aprovechan sobre todo aquellos territorios que previamente más estaban sufriendo la subida del gas natural, del que dependen sobre todo en invierno para la calefacción, dadas las temperaturas más bajas que las de otras regiones.

Cuatro de las cinco comunidades más beneficiadas por la medida están gobernadas por partidos distintos al del Gobierno que aprobó la medida. No obstante, el PP había pedido de forma recurrente desde 2021 que se aprobara dicha rebaja a la factura de gas natural. Es más, el día antes a que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunciara esta rebaja, los ministros de su Gobierno criticaron la propuesta.

No será suficiente con bajar el IVA

En cualquier caso, el alivio fiscal que notarán las familias consumidoras de gas no será suficiente para contrarrestar la exponencial subida que ha sufrido el recibo en el último año. Ni siquiera para los hogares con la tarifa regulada TUR, para la que el Gobierno aprobó un tope a las subidas a costa de un déficit que soportan las comercializadoras y tendrá que devolverse posteriormente.

Este mismo sábado, la TUR subirá algo más del 5%, por lo que la bajada del IVA supondrá un retroceso de la factura del 9%. Sin embargo, desde septiembre del año pasado, cada trimestre esta tarifa regulada ha experimentado subidas superiores al 5%. En peor situación incluso están los consumidores con tarifas libres, donde se repercute la fuerte subida del gas en los mercados mayoristas.

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De esta manera, los consumidores están recibiendo actualizaciones que suponen aumentos de entre el 50% y el 200% con respecto a los recibos del año pasado, por lo que la rebaja del IVA amortigua su subida, pero no la neutraliza. El gas en el mercado internacional ha pasado en poco más de un año de los 20 euros por MWh a más de 200 euros por MWh.

Este mismo viernes, la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, señaló en una entrevista en Onda Cero que aquellos ciudadanos que no se ven beneficiados por la deflactación del IRPF —todos los que ganan más de 21.000 euros brutos al año— cuentan con otro tipo de bonificaciones a productos concretos como la rebaja del IVA a la electricidad y al gas. La inflación está sufriendo las mayores subidas desde los años 80. En septiembre escaló un 9%, algo menos que en julio y agosto, cuando se disparó más del 10%. La inflación subyacente, cuyos efectos contra el poder adquisitivo son más a largo plazo, ya está por encima del 6%.