El juez aplaza la ejecución de la condena a Sáenz hasta que el Gobierno resuelva su indulto

El consejero delegado del Banco Santander y expresidente de Banesto, Alfredo Sáenz, no tendrá que cumplir de momento su condena. La Audiencia de Barcelona ha suspendido la ejecución de la sentencia que le condenaba a tres meses de arresto y suspensión de su profesión de banquero, así como una multa de 400 euros, por un delito de estafa procesal y presentación de acusación falsa, según desvela El País. De esta manera, la justicia le da tiempo para que el Gobierno revise su petición de indulto, trámite que puede durar hasta un año (Ver auto).

Sáenz, junto con los otros acusados, pidió amparo ante el Tribunal Constitucional por la sentencia dictada por la Audiencia de Barcelona y rebajada por el Supremo. A la vez, los acusados solicitaron el indulto al Ministerio de Justicia y la suspensión de la pena mientras se tramitaba el expediente.

Por ello, el juzgado catalán ha accedido a la petición del directivo y ha dejado en suspenso estas penas “porque son de corta duración”. Sin embargo, la audiencia ha rechazado no anotar la resolución en el Registro de Penados y Rebeldes hasta que se resuelva el indulto, otra de las peticiones de Sáenz. De esta manera, quería asegurarse de la “honorabilidad” que exige la ley para ser banquero. Así, ahora debe ser el Banco de España quien decida si el consejero puede seguir en su cargo.

"El mejor consejero delegado de la banca"

Desde que fue condenado, el presidente del Banco Santander, Emilio Botín, ha defendido a su mano derecha. “No procede en absoluto cesarle”, dijo en una de las últimas Juntas de Accionistas de la entidad. "Alfredo Sáenz es el mejor consejero delegado de la banca", añadió para zanjar el asunto, alegando que no hablaba de temas judiciales.

El caso de Saénz se remonta a 1994. Cuando era presidente de Banesto, y “con su conocimiento y beneplácito”, se presentó una querella por estafa y alzamiento de bienes contra cuatro empresarios “a sabiendas de que eran inocentes”. Saénz y el resto de acusados -José Ángel Merodio Zubiarrain, ex consejero director general del área comercial de Banesto; Miguel Ángel Calama Teixeria, ex director regional de Banesto en Catalunya y Baleares, y Rafael Jiménez de Parga, letrado externo del banco- presentaron la querella criminal contra Pedro Olabarria Declaux y sus socios, vinculados al grupo Olabarria o Grupo Harry Walker.

El banco les exigía el cobro de una deuda contraída con la entidad por valor de 600 millones de pesetas. Según el escrito del fiscal, los acusados dieron luz verde a la presentación de la querella sabiendo que los hechos y las afirmaciones en que se sustentaba eran falsos y que se saldó con la detención de los querellados.

Botín seguirá bajo sospecha fiscal durante años, según los inspectores de Hacienda - J.L. Lobo