El portero del Espanyol se ve obligado a dejar Twitter por los insultos y las críticas

Complicada situación la que vive el guardameta del Espanyol. Este fin de semana, el conjunto 'perico' caía derrotado en el último minuto ante el Sporting de Gijón (1-2), que infligió la segunda derrota consecutiva al conjunto catalán. Y algunos aficionados del equipo ya tienen a su culpable: Pau López, un joven de tan solo 20 años que se ha visto obligado, incluso, a cerrar su cuenta de Twitter.

Una parte de la afición del Espanyol considera que el meta es uno de los grandes responsables de que su equipo no esté mejor colocado en la Liga. Pese a marchar décimo en el campeonato nacional y haber sumado ya tres victorias, algunos hinchas creen que su conjunto podría estar más arriba, si no fuera por los problemas que sufren en su portería. Una situación que ha desembocado en un brutal acoso al meta.

Insultos de todos tipo, 'memes' con sus fallos -se le critica mucho el segundo gol de Menéndez en el 90'- o mensajes pidiendo al equipo que busque un portero han cansado al joven de 20 años. Acosado por las excesivas críticas a través de las redes sociales, Pau López ha decidido cancelar su cuenta de Twitter, para evitar el incesante chorreo de comentarios negativos y altisonantes que recibía de los usuarios.

En los últimos años, la presencia de un meta de primer nivel como Kiko Casilla hacía que el Espanyol contara con una de las porterías más seguras de la Liga, pero su venta al Real Madrid dio lugar a la búsqueda de un sustituto. El elegido fue Pau López, un portero que ya la pasada temporada brilló en la Copa con el conjunto catalán y al que Sergio González decidió darle la alternativa. Pero los 16 goles en siete partidos han hecho perder la paciencia a la afición.

Su compañero de equipo, el defensa Enzo Roco, lo tiene claro: "Las conversaciones que antes tenían lugar en los bares, ahora se producen en Twitter. Pau es un portero espectacular", confesaba. La desmesurada avalancha de críticas destructivas con constantes faltas de respeto ha dado pie al guardameta a cerrar su cuenta en las redes sociales, cansado de recibir mensajes en contra de su actuación en la portería.

Sin ningún género de dudas, la demarcación de guardameta es una de las más comprometidas, pues el mínimo fallo puede costar un gol, lo que hace que los arqueros estén más desprotegidos hacia la crítica que otros jugadores. Pau ahora tendrá la oportunidad de defender el arco de la selección española sub-21, con la que jugará este miércoles ante Georgia: el meta del Espanyol ha dejado de lado las redes... o, al menos, las sociales.