Marine Le Pen y su Frente Nacional dicen "no" a un Barcelona en la liga francesa

La realidad de Cataluña se presenta tremendamente incierta. Hay innumerables preguntas que se abrirán y requerirán respuestas de forma lo más inmediata posible. Que una región solicite de forma masiva (de producirse tal extremo), la independencia de su país conlleva una serie de cambios en la mayoría de ámbitos sociopolíticos y económicos si finalmente se lleva a cabo. El deporte, como parte integrante de las sociedades, también se ve implicado. En el caso de Cataluña, una de las cuestiones más preocupantes sería el futuro tanto del Barcelona como del Espanyol (como un pequeño gran ejemplo de la problemática). Y ya han surgido voces yuxtapuestas: unas realizando amenazas, y otras con ideas para solucionar el problema.

El alcalde de Barcelona, Xavier Trias, tuvo una iluminación, y se le ocurrió hace casi dos años hablar de la posibilidad de que, si Cataluña se independiza de España, que el Barça jugase la liga francesa. Aquella frase levantó mucha polvareda en su momento, como no puede ser de otra manera, pero ahí se quedó, vagando en el limbo de las preconcepciones futbolísticas. Sin embargo, aquellas declaraciones han sido recuperadas para la alteración política y deportiva por nada más y nada menos que por un consejero de Marine Le Pen, presidenta del Frente Nacional, el partido de la extrema derecha francés.

Vídeo: El Camp Nou clama por la indepencencia en el Clásico de 2012

Las declaraciones de este consejero, de nombre Eric Domard, podrían venir originadas por la información ofrecida por Francesc Aguilar, que asegura que el Barça lleva tiempo negociando de forma oculta pero firme varias opciones si se produce la independencia, y una de estas opciones es jugar en la Ligue1. Asímismo asegura que la UEFA estaría abierta a aceptar que el Barcelona jugase en otra Federación, tipo Monaco, algo que no ha permitido a Celtic y Rangers, que siempre han querido jugar en la Premier League inglesa.

Domard le plantea tres preguntas al alcalde de la Ciudad Condal. La primera es muy directa y casi amenazadora: “¿Cómo puede plantear una hipótesis como esa sin obtener previamente un principio de acuerdo con las autoridades deportivas y políticas francesas?”. En la siguiente, Domard cuestiona a Trias por sus alianzas dentro del mundo político francés. ¿Contaría con la buena voluntad y el apoyo de Manuel Valls –primer ministro de Francia nacido en Cataluña- que nunca ha escondido su simpatía por el FC Barcelona (recordemos su apoyo mostrado durante el partido de la Liga de Campeones en abril de 2013 entre el PSG y el Barcelona) para apoyar su afirmación?”.

Y para acabar el cuestionario, Domard le pregunta a Trias: “¿Tiene la intención de aprovechar el reciente nombramiento del presidente del PSG y ministro sin cartera en Qatar, Nasser Al-Khelaifi, en el Consejo de Administración de la Ligue 1 para que apoye esta solicitud, sabiendo que los dos clubes están hoy financiados por la dictadura islamista?”. Esta última pregunta hace referencia al patrocinio que desde 2011 lleva en su camiseta el club culé de primero Qatar Foundation y después Qatar Airways, dos organismos que pertenecen directamente al gobierno del emirato árabe. Al-Khelaifi, como qatarí, defiende los intereses de su país y podría ver con buenos ojos la inclusión del Barça en Francia.

El consejero de Le Pen advierte que “el Frente Nacional se opone a la participación del FC Barcelona como cualquier otro club de fútbol extranjero en el campeonato profesional de Francia. Mónaco sería la excepción que confirma la regla”. Además, cierra su comunicado con un recordatorio para el alcalde: “la Ligue 1 no es la Torre de Babel del fútbol europeo”.

Todo esto viene originado por la imposibilidad de que el Barça juegue en la Liga BBVA si Cataluña se independiza. Este extremo fue confirmado por partida doble por dos voces siempre polémicas pero, al fin y al cabo, autorizadas para hablar del tema, como Javier Tebas, presidente de la Liga de Fútbol Profesional, y Miguel Cardenal, presidente del Consejo Superior de Deportes. Tebas aseguró que "Si Cataluña se independizara, teniendo en cuenta que la Ley del Deporte seguiría vigente en el resto de España, el Barcelona no podría jugar ya que debería producirse una modificación de la ley de acuerdo con el Parlamento español". Mientras que Cardenal no se plantea unas " hipótesis que no creo que vayan a ocurrir, pero, en todo caso, la legislación española lo único que contempla es que en nuestras competiciones participen los equipos que forman parte de nuestro país".