Ross Brawn, entre el adiós y el reencuentro con Honda en McLaren

A todo futuro fichaje de Fórmula 1 suelen precederlenegativas yuna cascada de desmentidos. Ha sido también el caso de Ross Brawn estos días, ante los rumores de su posible marcha de Mercedes a final de temporada. En muchos caso, no suele haber puntada sin hilo.

Que un periódico alemán –Bild–anticipara la noticia estos díasno parece un disparo al aire. En todo caso, estos parecen ser los primeros movimientos de una de tantas partidas deajedrez que se juegan en la Fórmula 1 cada año, y que podría tener no soloa Brawn y Mercedes como protagonistas.

Cambio de panorama

“Estoy en negociaciones con Ross Brawn”, hubo de reconocer Niki Lauda al hilo de la noticia.“No hay una decisión de cómo terminarán las cosas a largo plazo. Ésta es la situación, y así ha sido durante algún tiempo. Mi objetivo es el de retenerle, pero él solo decidirá a finales de año”. De momento, el revuelo ha servido para reconocer que Mercedes y Brawn se están replanteando su futuro en común.

Es evidente que alguien del calibre deBrawn puede tener motivos para replantearse su posición. De ser cabeza de león en Mercedes, ha debido asumir una nueva estructura en el plazo de un año.A comienzos del actualllegóToto Wolf, nuevoresponsablede los programas deportivos del fabricante alemán. NorbertHaug, supredecesoren el cargo, ni siquiera tenía su despacho en Brackley. El austríaco, por el contrario, está instalado de forma permanente en la sede del equipo.

Y antes estaba ya Niki Lauda, que aterrizó como enlace con el consejo de administración de Daimler. De hecho, negoció el desbloqueo del Pacto de la Concordia para Mercedes con Ecclestone, y gestionó directamente el fichaje de Lewis Hamilton.Ambos cuentancon poderes en el equipo de Fórmula 1. Todavía más, también ambos son accionistas del equipo.Después llegó Paddy Lowea Mercedes, con cifras de “número de guía telefónica” como sueldo. Cabe dudar que quien fuera máximo responsable técnico de McLaren cambie de aires, sueldo millonario aparte, para ponerse a las órdenes de otro.

Tres décadas en la Fórmula 1

Son ya muchos gallos en el mismo gallinero, sobre todo para alguien quedirigió el equipocasi en solitario hasta hace pocas fechas. Así que la foto global apunta a que en Mercedes podría estar en marcha un proceso de transición que, en la lógica de los acontecimientos,terminaría con la salida de Brawn. De confirmarse, ¿sería unadecisión voluntaria ante elcambio de guardia en Mercedes? ¿O el primer paso camino haciaun nuevo proyecto en su trayectoria deportiva?

Uno de ellos, el de una retirada. Brawn cumplirá sesenta años, y alguna vez ha declarado que no se ve en la Fórmula 1 por encima de esa edad. Tras haber logrado todo tipo de éxitos y gran fortuna económica conla venta del equipo Brawn a Mercedes, el ingeniero británico podría despedirsecon el adiós a Mercedes.Son tres décadas de presencia en este mundo, adonde llegara a finales de los años setenta. Tras un breve paréntesis con Jaguar, volvió en 1991 a Benetton, y no ha abandonado el gran circo hasta el presente, salvo un año sabático tras la retirada de Schumacher en 2006. Cuando se rompió el esquema de trabajo en Ferrari con el triunvirato formado con Jean Todt y el piloto alemán, Brawn no quiso seguir en la Scuderia. Puede que con el nuevo paisaje de Mercedes tampoco quiera.

McLaren necesita refuerzos

Pero también caben otros supuestos. Martin Whitmarsh, team principal de McLaren, reconocía en Corea que el equipo británico tenía en cartera la incorporación de nombres técnicos “capaces de copar titulares”. Considerando el mercado actual y las figuras de renombredisponibles, pocas parecen ser las opciones: Allison acaba de llegar a Ferrari, Lowe a Mercedes y Newey no se mueve ni con una bomba atómica de Red Bull. Lógicamente, Whitmarsh ya se ha apresurado a negar que Brawn fuera uno de esos técnicos de titulares de prensa.

¿Está intentando crear McLaren esa estructura que le permita renacer de sus actuales cenizas?En 1980, el equipo británico no logró ningún podio en toda unatemporadaconsolo catorce carreras en el calendario. En 2013, vacamino de repetir semejante hito, pero ahora con diecinueve pruebas, con lo que firmaría una de las peores –si no la peor– actuacionesde su historia.

Ante semejante panorama, la llegada de Honda obliga a revolver las tripas del equipo británico. Desde McLaren ya han hecho público su interés por Fernando Alonso, quien tiene tiempo por delante para valorar la posibilidad de un increíbleretorno al equipo británico. Para el español, y viceversa, la presencia de Brawn debería ser una garantía adicional en el ‘paquete’ queMcLaren podría ofrecer al piloto asturiano. Y si Honda desea a un primer espada al volante, ¿qué no buscará en el terreno técnico? ¿Cuenta McLaren con alguien de semejante perfil?¿Cúales ofrece el mercado?¿No fueBrawn la pieza clave en la anterior experiencia del fabricante japonés en la Fórmula 1?

Así que, como dirían en Italia, si la despedida de Ross Brawnde Mercedes“non èvera, èben trovata”. Hagan sus apuestas.