Es noticia
Valverde, el hombre hecho de bronce
  1. Deportes
  2. Ciclismo
sube al podio de las tres grandes vueltas

Valverde, el hombre hecho de bronce

El líder de Movistar acabó tercero en el Giro, el octavo podio entre las tres grandes carreras por etapas, un éxito que probablemente nunca valoremos como se merece

Foto: Valverde, junto a Nibali y Chaves (EFE EPA LUCA ZENNARO).
Valverde, junto a Nibali y Chaves (EFE EPA LUCA ZENNARO).

Alejandro Valverde nunca será Miguel Indurain. Y el primero que lo sabe es él mismo. Nunca, desde que empezara a pedalear como profesional hace ya más de 14 años, se ha intentado poner a la altura de los mejores en este deporte. Porque él es otra cosa, otro tipo de deportista, y se puso unas metas en la vida que ha alcanzado poco a poco, sin ninguna prisa, sin infravalorarse, pero tampoco poniéndose unos objetivos que fueran imposibles de lograr. Hace no mucho, este periódico habló con Sergio Pachón, otro ‘viejo zorro’ del fútbol, que nos decía una frase muy significativa: “Lo mejor que le puede pasar a un deportista es saber dónde está su límite”. Valverde lo supo, y ha estado al límite toda su carrera.

[Vea aquí todo lo acontecido en el Giro]

Este fin de semana, el compañero Isaac Lluch entrevistaba a Manel Estiarte para el diario Ara. El consejero de Pep Guardiola decía algo revelador para el deportista de élite: “Para mí el fracaso es el jugador que no se entrena bien, el entrenador que se deja ir, el equipo que se abandona. Pero no aquel partido perdido por un tanto, por un error arbitral o por un centímetro de más o menos”. Valverde iba al Giro de Italia para ganar, porque Valverde siempre va a ganar adonde decida correr, pero ¿es un fracaso que no haya ganado la ‘maglia rosa’?

[Turín corona por segunda vez a Nibali]

No, no es un fracaso quedarse a 1:17 del campeón, de un ciclista que conoce el recorrido mejor que él, que tiene unas virtudes más específicas para el tipo de carrera que se iban a encontrar por delante. ¿Le dirían ustedes al último clasificado del Giro que ha sido un fracasado? No. Para Jack Bobridge, el susodicho último clasificado, sin duda es un enorme éxito el simple hecho de haber acabado la carrera. Ese es el límite que, por ahora, se ha puesto el corredor australiano. No es sinónimo de vergüenza, en este caso, sino de orgullo. Valverde no es inferior porque no haya ganado el Giro.

placeholder Valverde ganó una de las grandes etapas de montaña (EFE EPA CLAUDIO PERI).
Valverde ganó una de las grandes etapas de montaña (EFE EPA CLAUDIO PERI).

"El Giro de Italia ha sido muy bueno para nuestro equipo. Hemos estado de rosa con Andrey, conseguido una etapa y al final, tras mucho sacrificio, el premio de ser tercero en la general. En lo personal estoy muy contento de cómo va la temporada hasta ahora de lograr una victoria parcial y el podio final en mi primer Giro". Para Valverde es emocionante lo que está viviendo. Hace poco menos de un año cumplió uno de sus sueños de toda la vida, hacer podio en el Tour de Francia. Y ahora, ha conseguido hacer podio en las tres grandes. Casi siempre tercero, como en el Mundial. Valverde es un hombre hecho de bronce.

“Estoy supercontento porque es mi octavo podio entre Tour, Giro y Vuelta. Estar más contento es imposible. Yo creo que ya se me ha visto cuando he alzado de esa forma el puño en meta. Parecía que había ganado yo. Lo teníamos difícil, pero al final hemos hecho terceros, y si nos descuidamos, casi segundos. Es algo increíble para mí. Estar en el podio de las tres grandes vueltas por etapas es un logro fenomenal para mi carrera", dijo nada más acabar la penúltima etapa.

Pero Valverde no se frena aquí. Es un corredor voluntarioso y competitivo. Por supuesto que quiere ganar, ser el mejor, y es todo lo mejor que puede, por encima de las posibilidades de un corredor que no es un escalador primoroso. Y como no lo es, por eso eligió su próximo y principal objetivo, donde esta vez sí, quiere ser el primero: los Juegos de Río de Janeiro. Allí espera ganar el oro en un terreno muy propicio para él, con un final durísimo y una media montaña exigente. Y mientras se acerca agosto, tiene otro reto tan o más grande: hacer que Nairo Quintana gane el Tour de Francia. Porque los mejores no sólo son buenos individualmente, sino que hacen mejores al resto.

Alejandro Valverde nunca será Miguel Indurain. Y el primero que lo sabe es él mismo. Nunca, desde que empezara a pedalear como profesional hace ya más de 14 años, se ha intentado poner a la altura de los mejores en este deporte. Porque él es otra cosa, otro tipo de deportista, y se puso unas metas en la vida que ha alcanzado poco a poco, sin ninguna prisa, sin infravalorarse, pero tampoco poniéndose unos objetivos que fueran imposibles de lograr. Hace no mucho, este periódico habló con Sergio Pachón, otro ‘viejo zorro’ del fútbol, que nos decía una frase muy significativa: “Lo mejor que le puede pasar a un deportista es saber dónde está su límite”. Valverde lo supo, y ha estado al límite toda su carrera.

Alejandro Valverde
El redactor recomienda