Rigoberto Urán, el ciclista empresario que ha creado su propia línea de ropa

La vida profesional de un ciclista tiene una fecha de caducidad prematura. El sacrificio que exige el ciclismo profesional deja poco tiempo para completar unos estudios y una formación acorde al mercado laboral actual y muchos corredores cuando cuelgan la bici se encuentran a una edad temprana sin saber qué rumbo tomar. Otros, sin embargo, se labran un futuro paralelo a su vida en el pelotón, como es el caso de Rigoberto Urán. El colombiano fue ayer uno de los grandes beneficiados de la jornada y se aupó al tercer puesto de la general a escasos 59 segundos de Contador. Una situación envidiable, que como en la vida, no le nubla la razón para seguir con los pies en el suelo.

Pese a que el ciclista del Omega sólo cuenta con 27 años y en su palmarés ya presume de dos segundos puestos en el Giro de Italia entre otros éxitos, Rigo no se ha demorado en buscar una salida profesional que ocupe su tiempo cuando se retire del ciclismo. Urán ha apostado por el mundo de los negocios y ha creado su propia línea de ropa deportiva que comercializa a través de la tienda virtual Rigo Store (tienda.rigobertouran.com). "Hay que saber que el ciclismo llega un momento que se acaba y hay que seguir ganándose la vida", admite el ciclista de Urrao. "Trabajar como empresario, además, es una manera de tener los pies en el suelo porque cuando eres ciclista profesional te acostumbras a que te lo hagan todo y te den muchas facilidades. En mi faceta de empresario, sin embargo, soy yo quien monopoliza gran parte del trabajo", continúa.

Su exitoso Giro de Italia, en el que ganó una etapa y se vistió de líder durante varios días, fue aprovechado para el lanzamiento de su proyecto empresarial. "Llevaba tiempo con la idea de hacer algo. En Colombia los ciclistas somos como los futbolistas en España y la gente nos para por la calle y nos demanda algo que ponerse y que los identifique con nosotros. Así se me ocurrió la idea de la Rigo Store, pero no tenía los medios logísticos para llevarla a cabo. Después de mucho trabajo pudimos resolver ese problema y el día que me vestí de rosa en el Giro lanzamos la tienda on line", cuenta el líder del Omega. "El recibimiento ha sido magnífico y eso me ha dado fuerzas para seguir apostando por mi faceta de empresario", subraya.

Urán, cuando sus obligaciones como ciclista se lo permiten, se encarga de los diseños, de la producción, de la logística y hasta del reparto. De hecho, algunos clientes han sido sorprendidos por el ciclista colombiano cuando ha sido el propio Rigo quien le ha entregado en persona el pedido. "La verdad es que la cara de sorpresa de la gente te deja sin palabras. En momentos como esos recibes el cariño de la afición, que te piden fotos, autógrafos y te agradecen el gesto", reconoce. A veces, incluso, Urán es quien descuelga el teléfono en la centralita de pedidos. "Lo del teléfono tiene su aquel", cuenta. "En Colombia las bromas telefónicas por parte de las emisoras de radio están muy de moda y algunos se piensan que les estoy vacilando cuando les llamo o les cojo el teléfono", añade.

La acogida de los diseños por parte del público está desbordando los pronósticos iniciales y en breve el ciclista colombiano comenzará a expandir su negocio más allá de las fronteras colombianas. "Estamos muy contentos de cómo marchan las ventas. Yo siempre que puedo llevo los encargos en persona y eso sirve de aliciente para que se animen a comprar. Ahora es momento de ver dónde más podemos estar porque la demanda así nos lo exige. La intención es abrir tiendas en Estados Unidos -Miami será la siguiente-, México, Canadá y Costa Rica", revela el corredor antioqueño, que apostilla: "el volumen de pedidos es bastante regular desde que inauguramos la tienda. No obstante, yo les pido a todos que no dejen de comprar si los resultados en la carretera no son tan buenos como hasta ahora", bromea Urán.

La faceta de empresario, no obstante, queda aparcada durante estos días en los que el colombiano disputa la Vuelta a España, aunque en ocasiones la tentación de entrar en el correo electrónico y supervisar el día a día de la Rigo Store es incontrolable. "Por suerte mi novia me echa una mano durante estos días, pero ahora que estamos cerrando un acuerdo con Tag Heuer se hace inevitable estar pendiente del email. No obstante, soy profesional yahora el ciclismo es mi prioridad", manifiesta el ciclista colombiano, que se ha colado de lleno en la fiesta por el rojo. Una fiesta a la que llegó como invitado de piedra y en la que ahora es protagonista principal.