Hoy comienza la venganza de Contador: "No es cuestión de patriotismo, sino de justicia"

Tras 138 días de suspensión, Alberto Contador volverá a subirse hoy, miércoles, a su bicicleta para disputar una prueba del calendario profesional. Sin tiempo apenas de asumir su victoria en los despachos, el triple ganador del Tour de Francia volvió a demostrar la noche del martes su satisfacción tras la decisión de la Federación de absolverle. El madrileño confiaba en que el caso "podía dar un giro tras varios meses de incertidumbre" y así ha sido. El rostro de Contador aún reflejaba la tensión a la que ha estado sometido todo este tiempo. En la segunda entrevista con Pedro J. Ramírez, agradeció el apoyo recibido estos últimos días, en los que personalidades del mundo de la política y del deporte como Alejandro Blanco (presidente del COE), José Luis Rodríguez Zapatero o Mariano Rajoy han defendido públicamente su inocencia. "No es una cuestión de patriotismo, es una cuestión de justicia", aseveró. Ésa fue la palabra más utilizada por el ciclista: justicia.

Alberto Contador reconoció que nunca se planteó conformarse con la sanción de un año como proponía la RFEC. "Nunca tuve la tentación de hacerlo. Solo me vale que se reconozca que no he hecho nada. No podía aceptar una injusticia tan grande". El corredor de Pinto ha recibido el apoyo de un sector importante, pero también ha sido atacado durante meses por quienes no creían su versión. "Tienes que vivirlo para saber cómo se pasa. No solo yo, también la gente de mi alrededor. Se han dicho barbaridades y eso es un daño irreparable". Y es que lo que más le duele al tricampeón es el daño que se ha hecho a su honor y a su credibilidad: "Sin duda, eso es lo que más valor tiene para mí. Los que me juzgaban proponían un año de sanción y eso no era justo". El ciclista reconoció no dar crédito ante ciertas acusaciones. "Seis meses sufriendo, intentando llevar el caso de la mejor manera posible y veo cómo los propios dirigentes del ciclismo (en alusión a McQuaid, presidente de la UCI) me acusan de hacer daño a la imagen de mi deporte".

Tras seis meses expuesto a las críticas y con su futuro profesional pendiendo de un hilo, Contador comienza a ver algo de luz al final del túnel. Por eso ha instado a modificar la ley que rige el sistema antidopaje. "La norma hay que cambiarla. Animo a que se lo planteen por el bien del deporte porque se ha demostrado que hay que modificarla". No es ilógico que el corredor se sienta decepcionado después de ver cómo todo a su alrededor se desmoronaba mientras él seguía defendiendo su inocencia. "Siempre he creído en el sistema antidopaje, pero en la situación en la que estoy me hace plantearme si todo esto merece la pena. Para seguir creyendo tengo que ver primero qué es lo que hacen conmigo. Siempre he estado disponible y lo sigo estando"

El corredor era plenamente consciente de la dificultad de la situación y de que el caso se diera la vuelta, pero de no haber sido asó, reconoció que probablemente no habría recurrido al TAS. "No sé si ésa sería la mejor vía". Ahora, existe la posibilidad de que sea la UCI y la AMA quienes recurran. "Ambos tienen que analizar la resolución, que está basada en la justicia, es sólida y tiene una base jurídica. Pueden recurrir, pero más pruebas que en mi caso no puede haber, es imposible".

La Vuelta al Algarve, la nueva temporada de Contador

El asfalto del Portugal será testigo del inicio de su venganza. Disputará allí la Vuelta al Algarve donde defiende título en una prueba que año tras año va ganando peso en el calendario internacional y que ya es una referencia en este inicio de temporada. A partir de aquí, Contador comienza una temporada donde prometió el asalto a las tres grandes (Giro, Tour y Vuelta). Lo hizo enrabietado, días después de conocer su suspensión tras dar positivo por una cantidad despreciable de clembuterol y por la que, de momento, no ha sido sancionado.

La preparación del corredor para este curso ha sido la misma que si no hubiera estado suspendido. Además, la Vuelta al Algarve ya ha dado los años anteriores el pistoletazo de salida a la parte importante de la temporada de Contador. Ganó allí en 2009 y 2010, y este año servirá para comprobar si su estado anímico se ha visto afectado por el escándalo que ha protagonizado.