La estrella de Ricky Rubio deslumbra en el firmamento NBA

Sólo han pasado dos meses desde que Ricky Rubio ‘aterrizó’ en la NBA y desde que llegó no ha parado de recibir buenas críticas. El jugador de los Minnesota Timberwolves se ha adaptado perfectamente a la mejor liga del baloncesto del mundo y en muy poco tiempo ha conseguido hacerse un hueco en su primer All Star, el que se está disputando este fin de semana en Orlando (Florida).

La pasada madrugada Ricky Rubio disputó el partido de los novatos. El base catalán formó parte del quinteto inicial, junto a otra de las revelaciones de la NBA, Jeremy Lin, y junto a Monroe, Knight  y Blake Griffin, en un equipo dirigido por el que para el base de los Wolves fue siempre un ídolo, Shaquille O’ Neal: "Siempre le he tenido un gran respeto, he querido conocerlo y no he podido jugar contra él porque se retiró este año, pero bueno ahora será mi entrenador", dijo Rubio en la previa al partido.

A pesar de que su equipo no pudo con el conjunto que dirigía Charles Barkley (146-133), Ricky volvió a mostrar su mejor versión, pero sobre todo se divirtió y divirtió a la grada y a sus compañeros. Sus 12 puntos y sus siete asistencias, algunas de ellas espectaculares como su magnifico pase tras un caño a Cousins, dejaron patente su indiscutible calidad.

Récord mundial de canastas detrás del aro

Además de su gran actuación en el partido de los “rookies”, en la mañana previa al encuentro, el jugador catalán batió el record mundial de canastas consecutivas desde detrás del aro. Ricky encestó 18 canastas, 16 de ellas de forma consecutiva, en un minuto. Un auténtico récord que dejó en evidencia al estadounidense de origen taiwanés Jeremy Lin, la gran sensación de la NBA, que fue el primero en iniciar el duelo y que se quedó con sólo ocho canastas.

Ricky Rubio está disfrutando de su participación en el All Star como un niño con un juguete nuevo. El jugador ha reconocido que para él es un “sueño hecho realidad”, que “nunca había pensado estar aquí” y que se ha tratado de una experiencia “única”. Sólo hay que fijarse en su participación estelar para darse cuenta que el jugador catalán de 21 años se lo ha pasado en grande.

Sus números no paran de crecer en la NBA

El base catalán ya se ha hecho un nombre en el complicado mundo de la NBA. Sólo hay que ver cómo los medios de comunicación acaparan al español. En la previa del partido fueron él y Jeremy Lin los encargados de enfrentarse a la entrevista celebrada sobre la pista. Luego, todo fue puro espectáculo.  

Ricky aprovechó su presencia en el All Star para cerrar bocas y para disipar las dudas que habían surgido tras su salto a la NBA. El español está cada día más contento y aunque reconoce la dureza de la competición, lo importante para él ha sido mantener una gran confianza en sí mismo. El jugador de El Masnou tiene promedios de 11,5 puntos; 8,5 asistencias y 4,3 rebotes por partido. Unas cifras que, por el momento, no han hecho más que empezar a crecer.