El nuevo campeón de la NBA se decidirá por quinta vez en la historia en el último partido

Llegó la hora de la verdad en la NBA. Cada lanzamiento, cada tapón, cada robo, cada perdida esta madrugada tendrán más valor que nunca: Miami Heat y San Antonio Spurs se juegan el título de campeón del mejor torneo de baloncesto del mundo, y lo hacen en el séptimo y definitivo partido de las Finales de la NBA. Será el quinto título que se decida en el último encuentro, después de un sexto choque que ya forma parte de la historia.

Con 20 segundos para acabar el partido, cinco puntos de ventaja y posesión del balón, los Spurs no supieron certificar una victoria que les hubiera hecho merecedores del quinto Anillo de la franquicia. Comandados por LeBron James y con un veterano Ray Allen en plan estelar, Miami fue capaz de forzar la prórroga de manera milagrosa, en la que terminarían ganando el partido y forzando el séptimo choque. Hoy ya no valen más excusas.

Miami y San Antonio buscarán en la madrugada del jueves al viernes en España una victoria que les consagraría como los campeones de la NBA. Dos estilos de juego volverán a medirse en el American Airlines Arena: la potencia de la maquinaria de los Heat frente al baloncesto de equipo de los Spurs. Hoy es el momento para que las grandes estrellas de ambos combinados brillen de verdad en busca del títulos para sus equipos.

LeBron James tiene claro cuál es la clave para ganar: "Lo único que necesitamos es salir a jugar nuestro mejor baloncesto, tener el apoyo de los aficionados y que confíen en nosotros". La estrella de Miami busca su segundo anillo, pero enfrente tendrá a un Tony Parker que no quiere volver a brillar: "Sabemos que podemos ganar el partido como lo demostramos en los tres que conseguimos. Vamos a salir más convencidos que nunca", aseguró.

Ambos equipos dejan a un lado el sexto partido de la serie, asegurando que ya es historia lo que pasó. Ni el tropiezo de los Spurs ni la remontada de los Heat servirá para darles ventaja en el encuentro definitivo, por lo que ambos conjuntos sólo piensan en el choque de esta noche: "Hablar del sexto partido no tiene ya ningún sentido, al contrario, quedó olvidado a las pocas horas de haber concluido y aprendimos de lo que sucedió", sentenció Tim Duncan.

La quinta final que se decide en el quinto partido

Desde que se impusiera el sistema 2-3-2 en la fase final de la NBA, el partido de esta noche será la quinta vez en toda la historia de la NBA en la que se decidirá al campeón del torneo en el séptimo encuentro. Para Miami se trata de una situación nueva, mientras que San Antonio ya vivió algo similar en 2005, cuando consiguió derrotar a los Detroit Pistons en el partido definitivo para hacerse con el que, por entonces, suponía su tercer anillo.

La primera final que se decidió en el séptimo partido tuvo lugar en 1988. Los Angeles Lakers y Detroit Pistons se jugaban el Anillo, con Magic Johnson e Isaiah Tomas como grandes estrellas de ambos conjuntos. Sin embargo, el encargado de marcar la diferencia iba a ser James Worthy, que iba a entrar en la historia de la NBA al ser el primer jugador en firmar un triple-doble en el séptimo partido, con 36 puntos, 11 rebotes y 10 asistencias.

Seis años después, en 1994, Houston Rockets y New York Knicks iban a volver a jugarse el título en el partido definitivo. Y el desenlace iba a recordar demasiado a lo ocurrido este año, pues en el sexto partido John Stark iba a tener un triple para dar el campeonato a los neoyorkinos que no acertó a materializar. En el séptimo choque, Hakeem Olajuwon iba a emerger como el factor determinante para dar el triunfo a los Rockets.

En 2005, los Spurs iban a demostrar que el trío formado por Parker, Duncan y Ginobili tenían mucho que decir, consiguiendo sus segundo título frente a los Pistons. Y, por último, en 2010, los Lakers de un espectacular Pau Gasol iban a llevarse el Anillo ante unos Boston Celtics que no pudieron volver a reverdecer viejos laureles. Hoy se decidirá al nuevo campeón de la NBA, en un séptimo partido que apunta que será vibrante.