La superioridad sin efectividad vuelve a desquiciar al Barcelona en Granada

Después de acostumbrarse a las goleadas, al Barcelona le cuesta últimamente perforar la portería contraria. Sucedió ante el desconocido Viktoria Plzen en Champions y también frente al Sevilla, llegando a rozar la desesperación. La superioridad  ya no es sinónimo de efectividad y el ajustado resultado cosechado en El Nuevo Los Cármenes volvió a poner en evidencia la falta de puntería que acusa en los últimos partidos. El Granada, de vuelta a Primera tras 32 años, se lo puso fácil, pero ni por esas. Pep Guardiola esperaba un “equipo valiente”, diferente al Sevilla del Camp Nou del pasado sábado, pero se encontró a un equipo encerrado atrás que logró el que probablemente fuera su objetivo, no salir goleado, y eso que terminó el encuentro con 9. El solitario gol de Xavi, que hoy igualaba a Migueli como el jugador del FC Barcelona con más partidos en Primera, fue lo que dio los tres puntos a su equipo.

Guardiola sorprendió con el once. El joven Isaac Cuenca podrá presumir de debutar con el Barça en el mismo campo donde lo hizo Johan Cruyff. Granada le pareció al técnico el lugar idóneo para dar la oportunidad de estrenarse con el primer equipo a otro canterano. El sacrificado fue Villa, que se quedó en el banquillo junto a Iniesta y Thiago, aunque el asturiano tuvo que salir al rescate por la lesión de Pedro, obligado a retirarse por una distensión en los tendones del tobillo izquierdo.

El partido se presentaba descompensado,  con un recién ascendido a un lado del campo y al otro, el equipo más temido del momento. La afición granadina parecía más emocionada por recibir al campeón de Europa que por la posibilidad de sacar un buen resultado. El equipo rojiblanco estuvo en manos del Barça desde el pitido inicial, que monopolizó el partido. El balón parecía que le quemaba en los pies al combinado andaluz y su gran preocupación era mantener la posición en defensa. Más allá de medio campo sus movimientos eran precipitados y torpes  y mostraba demasiado nerviosismo en cada una de las contras de las que dispuso y que parecía su única baza. Dani Benítez era quien más lo intentaba.

El Barça tocaba hasta aburrirse, buscando el hueco entre la tupida defensa del Granada. Xavi y Cesc, ya recuperado de su lesión y de vuelta en el once inicial, repartían el juego y Messi, Pedro y el debutante Cuenca buscaban el fallo de la zaga. Los azulgrana pudieron adelantarse por medio del argentino, que se lució con uno de sus habituales regates pero su disparo cruzado se marchó rozando el poste. Cuenca lo intentó con una rosca desde el pico del área y Pedro con un cabezazo envenenado que tampoco acabó dentro de la portería de Roberto.

El Granada aguantó el marcador media hora, hasta que Xavi vio puerta con un lanzamiento de falta ejecutado a la perfección. La primera parte fue un monólogo del Barça pero al descanso tuvo que conformarse con una ventaja mínima, la misma con la que llegaría al final del encuentro.

A los siete minutos de la reanudación,  el partido se le puso al conjunto de González aún más cuesta arriba al quedarse con un jugador menos. Jaime Romero vio la segunda amarilla en una jugada en el que entra con la pierna muy arriba y da con el pie en la cara a Maxwell. Pero mientras el brasileño salió indemne del lance, el que estaba tendido en el suelo era Pedro. El canario se quedó con la puntera clavada en el suelo y sin ayuda de nadie se hizo daño en el tobillo. Villa tuvo que entrar en el terreno de juego porque no pudo seguir.

Pero el Barça seguía en la tónica de sus últimos encuentros. Le cuesta matar los partidos y no le resulta tan fácil marcar, aunque el rival ni siquiera sea capaz de plantarle cara. No es que no goce de ocasiones, es que los goles no llegan. Hasta Abidal, hoy compañero de Mascherano en el centro de la defensa, intentó batir a Roberto. Aunque la ocasión más clara de todo el encuentro la tuvo Messi. La vaselina del argentino iba directa a la red, pero cuando el 0-2 estaba a punto de consumarse, Mainz sacó en la misma línea de gol. La Pulga no daba crédito y pidió a Muñiz Fernández que el tanto subiera al marcador, pero la decisión del árbitro fue correcta. No lo fue, sin embargo, el fuera de juego que frenó la jugada en la que Geijo. Aunque su posición era correcta, no definió bien y detuvo Valdés, sin apenas trabajo en los 90 minutos.

Los locales dieron la sensación de poder hacer algo en la recta final del partido, pero en el descuento perdieron a otro hombre más. La segunda amarilla a Dani Benítez dejó al Granada con 9 por lanzar un balonazo para protestar por un fuera de juego. Así acabaron los rojiblancos, diezmados, pero al menos no goleados. El Barça, por su parte, vuelve a casa con tres puntos importantes, pero con la sensación de que algo falla.

 Ficha técnica

0 - Granada: Roberto, Nyom, Siqueira, Mainz, Íñigo López, Fran Rico (Mollo, m.79), Mikel Rico, Abel Gómez, Jaime, Dani Benítez y Uche (Geijo, m.63)

1 - Barcelona: Valdés, Alves, Maxwell, Mascherano, Abidal, Busquet, Xavi (Keita, m.83), Cesc (Iniesta, m.71), Pedro (Villa, m.55), Cuenca y Messi

Goles: 0-1, (m.32): Xavi

Árbitro: Muñiz Fernández (Asturiano). Expulsó por doble tarjeta amarilla a los locales Jaime (m.53) y Dani Benítez (m.90). También mostró cartulina amarilla a los locales Uche, Fran Rico y Nyom, y a los visitantes Alves, Busquet, Cuenca y Keita.

Incidencias: Partido correspondiente a la décima jornada de Liga en Primera división disputado en Los Cármenes ante más de 22.000 espectadores, prácticamente lleno.