Higuaín, el hombre ante la adversidad, da la razón a Mourinho

Decía Mourinho tras el 'hat trick' de Higuaín del sábado que era muy difícil decidir entre uno u otro jugador para diseñar el once titular. Se refería al nuevo debate que se ha instalado en el Real Madrid: con los dos delanteros blancos en plena forma, ¿quién será titular? Karim Benzema ya está recuperado de su lesión y coincidirá en el tiempo con el 'Pipita', ambos en un gran estado de forma y con suerte de cara al gol. Pero si Mou tuviera que reconocer por quién siente predilección, la balanza se inclinaría del lado del argentino. El técnico confió en él desde el principio, le gustaba más que el '9' de Florentino, y ahora él mismo se está encargando de demostrar que Mou no estaba equivocado. Su  trayectoria no está exenta de dudas, pero ahora es cuando está recogiendo el fruto de la constancia, sembrada durante años.

"Al argentino ni tocarlo". Desde su llegada al banquillo madridista, Mourinho apostó por Higuaín y pidió a la directiva que ni se planteara traspasarle, todo lo contrario de lo que hizo con Benzema. La irregularidad del francés acabó con su paciencia la pasada temporada. La maltrecha espalda del Pipita obligó a Mou a brindarle numerosas oportunidades con la esperanza de que el llamado a ser la referencia en el ataque asumiera de una vez su papel y se conviertiera en una garantía de gol, cosa que no ocurrió hasta el final de la 2010/11. Parecía que sí, pero no terminaba de cuajar. Y es que si Benzema sigue vistiendo la camiseta del Real Madrid es por la insistencia de Florentino, culpable de su fichaje y responsable de su continuidad en el equipo.

Pero este año es diferente. El inadaptado Karim parece haber ganado la confianza que le hacía falta para explotar en el área e Higuaín parece completamente recuperado tras su operación de hernia discal a juzgar por su espectacular promedio goleador (tres tripletes en 13 días). En su casa guarda los dos balones que le recuerdan sus dos 'hat-tricks' consecutivos en Liga (tres si contamos el que hizo con Argentina). Mourinho acertó reteniendo al 20, y ahora, con Cristiano Ronaldo poseído por el espíritu colectivo, sí tiene motivos para confiar en su delantera. Según dijo, el buen momento de ambos es todo menos un problema.

No le falta razón. Para problema el panorama con el que se encontró la pasada campaña. Mourinho se cansó de pedir otro delantero y reconoció públicamente que rezaba para que ninguno de sus dos atacantes se lesionara. Dicho y hecho, uno de ellos no solo se lesionó, sino que tuvo que pasar por quirófano, y la china le tocó a Higuaín. Operación de hernia discal y seis meses de recuperación que al final quedaron en tres (cuatro meses en total fuera de la competición). La decisión fue difícil y tras mucho debate se optó por la intervención quirúrgica. La recuperación se preveía complicada, pero su reaparición fue mucho más rápida de lo esperado y su rendimiento, meteórico.

La constante lucha por la titularidad

Y es que Higuaín no lo ha tenido nada fácil en el Real Madrid. Aterrizó en el Bernabéu con solo 20 años procedente de River Plate con el cartel de joven promesa argentina, pero las dudas nunca le han abandonado desde su debut en 2007. Su fama de mal definidor le impidieron consolidarse como delantero indiscutible, sin embargo, sus buenos números a final de temporada eran su tabla de salvación. Con goles o sin ellos, nunca llegó a tener asegurada la titularidad.

Después de Ramón Calderón llegó Florentino y con él, el desfile de fichajes. Benzema, el protegido del presidente, suponía una amenaza, pero Higuaín trabajó para no cederle el puesto tan fácilmente. Su lesión y la llegada de Adebayor, el refuerzo que pedía Mourinho, fueron las otras piedras en el camino. Para hacerse valer en el peor de los momentos que ha vivido en Chamartín utilizó la única táctica que conoce: el trabajo y la constancia. Se hablaba del posible fin de su carrera, pero el argentino ha sabido reponerse una vez más a la adversidad, esta vez ayudado por una impresionante racha goleadora.