FIFA descarta la repetición y medita muy seriamente sancionar a Henry

Sigue el culebrón. La ya famosísima mano de Thierry Henry copa la actualidad deportiva en toda Europa. Y tanta presión mediática es demasiada para que la FIFA se quede de brazos cruzados. El Confidencial ha contactado con un miembro relevante del organismo internacional, quien ha confesado que las intenciones de la FIFA son sancionar al jugador francés, con el único objetivo de calmar algo los ánimos.

Porque la repetición del encuentro está totalmente descartada, tal y como ha anunciado este mismo viernes la FIFA en un comunicado donde vuelve a remitirse a las concisas reglas del juego. Este jueves, el organismo con sede en Zurich (Suiza) había recibido por carta la petición de la Federación irlandesa (FAI) para que se volviera a jugar el encuentro de vuelta de la repesca mundialista.

Pero la máxima autoridad del fútbol mundial anunció que no hay ningún resquicio en su reglamentación que permita satisfacer la petición de los irlandeses. Por tanto, el resultado es definitivo y Francia jugará el Mundial de Sudáfrica 2010.

La consternación apodera el sentimiento de millones de aficionados por la forma en que se decidió el partido. Incluso, la ministra francesa de Economía, Christine Lagarde, ha declarado que lo mejor sería volver a jugar el encuentro ante Irlanda. Como la federación presidida por Joseph Blatter ha negado esta posibilidad, para compensar sancionarán, seguramente, a Henry con dos o tres partidos por su acción ilegal.

Según la fuente consultada por este medio, la idea de FIFA es aplicarle una sanción al delantero del FC Barcelona que le impida jugar el primer encuentro de Francia en Sudáfrica. El hecho de que Henry se pierda el debut de los galos supone que mediáticamente parezca que la FIFA ha aplicado cierta justicia tras el escándalo.

Pero no deja de ser curioso que se sancione a un jugador por una acción que, de haber sido vista por el árbitro, se hubiera quedado en un libre directo a favor de Irlanda y tarjeta amarilla para el delantero. En ese caso, a nadie se le hubiera ocurrido pedir sanción posterior alguna para el infractor. Es decir, Henry será sancionado a causa de un error de apreciación del árbitro, y con el único fin de intentar calmar a la confusa opinión pública.