El Imperio de Nadal contraataca en Wimbledon

Nadal sigue en boca de todos pese a que está de vacaciones después de conquistar su primer título en hierba. Y es que el de Manacor ha demostrado que está, quizás, en su mejor momento. Su juego denota frescura, juventud, entusiasmo. Verlo en la pista desplazándose de lado a lado sin hacer una mueca de esfuerzo, salvando bolas insalvables, siempre con la concentración intacta y adelantándose a la respuesta del rival, ha sido un deleite que se ve en la pista y se disfruta en casa.

Pero ahora está descansando en Mallorca. Pasea por las calles con tranquilidad. Juega al Golf y practica deporte. Nadal se ha olvidado del tenis al menos hasta el jueves, que es cuando viajará a Londres en busca de su sueño perdido: Wimbledon. Pero con una diferencia. Ya ganó un torneo en hierba. El Queen’s. Y llega como favorito. Llega con ganas de revancha, con ganas de comerse el mundo y cosechar su 29 título de la ATP. “Rafael se encuentra muy bien y recuperándose de las molestias en la mano que sufrió en Queen's. A Wimbledon llegará en plenitud de condiciones” dice su tío y entrenador Toni Nadal.

El mallorquín cada día es más completo. Rompió el maleficio de 36 años sin que un español ganara en hierba. El último fue Andrés Gimeno en Eastbourne en 1972. Pero no podía ser otro que Nadal el que pusiese orden y diese un golpe en la mesa. Ahora le espera Wimbledon. Un torneo de primera elite que se caracteriza por su elegancia en la pista. Por su blanca vestimenta obligatoria. Por su complejo protocolo de llamar a los deportistas como Miss o Mrs. Por los colores verde y violeta que decoran el torneo y por la lluvia que interrumpe continuamente los partidos. Pero en entre todo ese colorido, también le esperan un pelotón de tenistas comandados por Djokovic y Federer que quieren detener al ‘Huracán Nadal’. Esta vez Rafa cambiará la historia en la Centre Court y escribirá su nombre en el torneo de tenis más antiguo del mundo.