El templo del cine indie prohibe la entrada a Madonna por alborotar

Se trataba de uno de los eventos cinematográficos del año. El estreno de Doce años de esclavitud (Steve McQueen, 2013) en el Festival de cine de Nueva York. Todo el mundo conteniendo la respiración ante las imágenes de este drama sobre la esclavitud que apunta a los Oscar... O casi todo el mundo: Madonna se pasó media película enviando mensajes de texto con su móvil, ante la protesta de los críticos y cinéfilos de su alrededor. Pero Madonna (buena es ella) no reculó ante los ataques: calificó de "esclavistas" a los que le pedían que apagara el móvil y aseguró que era una cuestión de "negocios", según contó el crítico Charles Taylor al Daily Mail.

El incidente no hubiera pasado de allí, de anécdota protagonizada por una Celebritie encantada de conocerse, de no ser porque Madonna no se encontraba en un cine cualquiera, sino en uno de la cadena indie Alamo Drafthouse, célebre por su línea dura con aquellos espectadores que alborotan durante la proyección e interrumpen la experiencia fílmica.

"Hasta que Madonna no emita una disculpa pública a todos los que asistieron al festival, no podrá entrar en ninguna de nuestras salas en EEUU", aseguró Tim League, presidente de Alamo Drafthouse.

En efecto, Alamo Drafthouse tiene unas estrictas normas de protocolo y comportamiento dentro de sus salas. Los menores de seis años no tienen permitida la entrada. Tampoco ningún menor que no vaya acompañado de sus padres. Está prohibido hablar por teléfono y mandar mensajes de texto o tuitear durante la proyección. La empresa se reserva el derecho a expulsar a cualquiera que incumpla lanormativa.

La cadena proyectaincluso un tráiler antes de cada proyección en el que recuerda el modo de comportarsea los espectadores. Y en el que, para rizar el rizo cómico, se ha añadido la reacción airada de un espectador expulsado una vez de una de lassalas, quizás para dejar claro que la cosa van en serio.

Alamo Drafthouse es el nuevo templo de la cinefilia en EEUU. Y hacetodo lo que estáen su mano para que nadie perturbe a su público durante las proyecciones. Sea quién sea. "Si no eres capaz de comportarte y estar tranquilo durante una película, no te queremos en nuestros cines", advirtió League hace unos años. Dicho y hecho: Madonna a la calle.