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Una triatleta conquista Hollywood con 'Sin novedad en el frente'
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Una triatleta conquista Hollywood con 'Sin novedad en el frente'

Lesley Paterson, campeona mundial de triatlón, es la dueña de los derechos para cine de la novela y coescribió el guión de la película junto a su marido y un amigo

Foto: La triatleta Lesley Paterson y su marido Simon Marshall en la gala de los Oscar. (EFE/EPA/Caroline Brehman)
La triatleta Lesley Paterson y su marido Simon Marshall en la gala de los Oscar. (EFE/EPA/Caroline Brehman)

Fue campeona mundial de triatlón de campo a través y de xterra entre los años 2012 y 2018. Una verdadera estrella de su deporte. Pero la británica Lesley Paterson (Escocia, 1980) también tenía otras pasiones: el cine y la literatura, otra muestra de que no siempre el deporte y la cultura están tan distanciados.

Le entusiasmaba desde hacía años la novela Sin novedad en el frente, ese alegato antibélico de Erich María Remarque, publicado originalmente en 1929. Escribió un guion sobre el libro junto al periodista Ian Stokell y en 2006 compraron los derechos para una película., que no se acabaría rodando hasta 2021. Distribuida por Netflix, el resto es historia: con hasta nueve nominaciones, esta madrugada se llevó cuatro estatuillas (mejor película extranjera, mejor fotografía, mejor banda sonora y mejor diseño de producción). Todo un exitazo para una película alemana en los Oscar.

Rugby, triatlón y literatura

Paterson comenzó su afición al deporte con el rugby, al que jugaba con niños (varones). Cuando ya no se le permitió jugar más con los chicos, comenzó a correr y de ahí saltó al triatlón mientras en la universidad estudiaba inglés y drama. La literatura, el teatro y el cine siempre fueron de la mano mientras ganaba carreras y añadía metales a su medallero, en no pocas ocasiones, de oro.

Fue en su época estudiantil cuando leyó la novela de Remarque y nunca se le fue de la cabeza. Por su tono de aventuras, pero también porque le quita toda gloria a la guerra. Porque en la guerra uno, sobre todo, un chaval joven, a lo que va es a morir y no a colgarse medallas como si puede hacer un alto cargo que jamás pise el frente. Ella misma habló así de la novela en una entrevista: “Es una historia sobre la desesperanza y la impotencia, sobre la traición a la generación joven. Mi carácter va en contra de las autoridades y a favor del hombre de la calle, del hombre común. Soy una persona de izquierdas”.

"Mi carácter va en contra de las autoridades y a favor del hombre de la calle, del hombre común. Soy una persona de izquierdas"

La escritura del guion, no obstante, cambió algunas cosas con respecto a la película. Por ejemplo, toda la parte de las negociaciones -el papel que interpreta Daniel Brühl- y la muerte del protagonista es mucho más efectista en la cinta que en el libro, donde apenas se despacha con unas breves líneas al final. De hecho, es una muerte que sucede un día en el que el parte de la guerra culmina así: sin novedad en el frente. Un muerto más o menos no es nada en un conflicto bélico. Las vidas humanas no importan, venía a decir Remarque, que algo sabía de lo que hablaba puesto que vivió de forma traumática su presencia en el campo de batalla durante la I Guerra Mundial.

placeholder Ernestine Hipper y Christian M. Goldbeck posan con su premios Oscar a Mejor Diseño de Producción por el filme 'Sin novedad en el frente' (REUTERS)
Ernestine Hipper y Christian M. Goldbeck posan con su premios Oscar a Mejor Diseño de Producción por el filme 'Sin novedad en el frente' (REUTERS)

Precisamente, estos cambios y el mayor dramatismo son algunas de las críticas que se le han hecho a la película desde la propia Alemania, donde los críticos creen que es más un guion original que adaptado de la novela.

Porque, además, en un principio tampoco se iba a hacer en alemán sino en inglés. A punto estuvieron de hacerla hacia 2012 con un interesadísimo Daniel Radcliffe para el papel protagonista. Pero no salió adelante y tanto Paterson como su marido Simon Marshall y Stokell se endeudaron hasta las cejas para mantener los derechos como película. Hasta pusieron de aval la hipoteca de sus casas.

Paterson, su marido Simon Marshall e Ian Stokell se endeudaron hasta las cejas para mantener los derechos como película

Todo cambió en los últimos años por diversos motivos. Uno fue que Paterson conoció a Edward Berger y Malte Grunert, director y productor alemanes, en la Berlinale de 2020, quienes se interesaron en un texto que no ponía precisamente bien a las autoridades alemanas de la I Guerra Mundial. Otro fue que las películas de fuera de EEUU empezaban a tener cada vez más importancia dentro de la industria (Parásitos había ganado el Oscar en 2020), y, por último, la I Guerra Mundial empezaba a ser atractiva con cintas como 1917. Sin novedad en el frente reunía esas tres características. Cuando finalmente entró Netflix en el proyecto todo estalló (para bien).

La película se ha convertido en una de las grandes sorpresas durante los últimos meses. Poco a poco ha ido ganando espectadores con un boca a oreja y un buen planificado asalto a los premios por parte de la plataforma, se ha llevado siete BAFTA, incluido el de mejor película -los Oscar británicos- y ha dejado su huella en los Oscar. Después de 16 años con el proyecto a cuestas, Paterson lo resumía en una entrevista hace unos meses en The Guardian: “¿Obsesiva? Sí, eso es lo que soy”.

Fue campeona mundial de triatlón de campo a través y de xterra entre los años 2012 y 2018. Una verdadera estrella de su deporte. Pero la británica Lesley Paterson (Escocia, 1980) también tenía otras pasiones: el cine y la literatura, otra muestra de que no siempre el deporte y la cultura están tan distanciados.

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