César Strawberry: "Es una persecución ideológica propia de regímenes totalitarios"
El Tribunal Supremo revoca la absolución de la Audiencia Nacional y condena al líder de Def con Dos a un año de cárcel porque sus tuits "alimentan el discurso del odio y legitiman el terrorismo"
Un año de cárcel y seis años y seis meses de inhabilitación absoluta por unos tuits que "alimentan el discurso de odio, legitiman el terrorismo como fórmula de solución de los conflictos sociales y, lo que es más importante, obligan a la víctima al recuerdo de la lacerante vivencia de la amenaza, el secuestro o el asesinato de un familiar cercano". De este modo, el Tribunal Supremo ha revocado este jueves la sentencia de la Audiencia Nacional que absolvía a César Strawberry, líder de Def con Dos, de los delitos de enaltecimiento del terrorismo y humillación a las víctimas de ETA y los Grapo, y le ha condenado a un año de prisión.
El músico, que ha conocido el contenido de la sentencia gracias a los medios de comunicación, asegura que la resolución de la sala "es un atropello claro de mis derechos más elementales". "Mi reacción es de perplejidad y estupor ante un ejemplo de manipulación judicial que me deja desamparado desde el momento en el que se le da la vuelta, sin dejarme opción a nada, a la sentencia de la sala primera de la Audiencia Nacional, que no es precisamente un tribunal blando ni fácil", añade en conversación con El Confidencial.
"Es un atropello claro de mis derechos más elementales. Mi reacción es de perplejidad y estupor ante un ejemplo de manipulación judicial que me deja desamparado"
Strawberry, juzgado por unos tuits escritos entre noviembre de 2013 y enero de 2014, denuncia que la normativa europea dicta que se debería haber abierto un nuevo juicio con pruebas y testigos: "A mí se me ha privado de ese derecho. Me siento absolutamente ninguneado por la Justicia". "Sorprende el hecho de que yo sea vigilado durante varios años y se esté buscando a través de una investigación prospectiva, que es algo prohibido por nuestro ordenamiento jurídico, para ver qué hago y cómo meterme mano, y cuando la Justicia me da la razón, se van cambiando los argumentos y recurriendo porque esas resoluciones no favorecen a la Fiscalía".
El juez De la Mata archivó su causa en septiembre de 2015 y en julio la Audiencia Nacional le absolvió, "al considerar que los tuits forman parte de mi discurso cultural". El Ministerio Fiscal recurrió la sentencia y ahora el Supremo le condena, puntualiza, "sin darme opción de abrir un nuevo juicio y dictamina de una forma completamente arbitraria una sentencia condenatoria que evidentemente pienso recurrir porque soy inocente". El artista puede recurrir el fallo del Supremo ante el Tribunal Constitucional y, después, si fuera necesario, a Estrasburgo.
"La zafiedad y el mal gusto son un derecho"
"Esto es una persecución ideológica propia de regímenes totalitarios", prosigue Strawberry. "Vemos cómo se habla de lo malo que es Maduro y los grandes dictadores del mundo, pero en España no estamos al margen. Es una cronología de los hechos novelesca propia de Kafka o de Orwell y '1984". Preguntado a qué cree que se debe esa persecución, el músico es tajante: "Porque tengo un criterio abierto, no me vinculo a una ideología, defiendo el libre pensamiento y desde hace años cuestiono muchas convenciones y dogmas del mundo en el que vivimos desde el punto del vista del humor, el sarcasmo y la provocación. Ese perfil a determinados inquisidores de la sociedad española les ha parecido muy interesante para ejemplarizar y para que mis seguidores, que son muchos, piensen que hoy es César pero mañana puede ser cualquiera", analiza.
Sobre el tono de sus tuits —algunos por los que ahora se le condena rezaban "el fascismo sin complejos de Aguirre me hace añorar hasta los Grapos"; "Street Fighter, edición post ETA: Ortega Lara versus Eduardo Madina"; "cuántos deberían seguir el vuelo de Carrero Blanco", o el "roscón-bomba" de regalo para el cumpleaños del Rey—, el músico afirma que no va presumiendo "ni de ser el más gracioso ni de tener el mejor gusto escribiendo canciones o tuits, pero la zafiedad y el mal gusto son un derecho también. Hasta ahora lo eran. A lo mejor ya no".
Cita la cultura punk y 'underground' de los años setenta y ochenta, en este sentido, para recalcar que su condena "es un ataque directo a todo lo que supone el libre discurso creativo". "Están interpretando a su manera comentarios irónicos sobre políticos, que además son figuras públicas. Incluso se recurre a figuras del pasado, como puede ser Carrero Blanco, lo que es del todo absurdo porque ahora pretenden convertirle en una víctima". En el fondo, analiza, todo responde a "una cacería perfectamente diseñada por un Ministerio del Interior absolutamente politizado". "En el mundo del espectáculo me han seleccionado a mí. Me ha tocado el Gordo. Responde a una estrategia internacional de criminalización del pensamiento disidente y de facilitar la persecución ideológica a través de leyes muy difusas que no dejan claro qué es delito y qué no. Esa indefinición da lugar a restricciones de derechos como la libertad de expresión, manifestación...".
"Debe existir una ley de protección a las víctimas pero acotada a humillaciones expresas y no a la interpretación del juez que toque"
Esa es precisamente la clave que da César Strawberry para acabar con la "utilización perniciosa de leyes" como la Ley Mordaza que ahora le condena tras su absolución. "Debe existir una ley de protección de las víctimas, pero debe acotarse a humillaciones expresas y no que todo quede a interpretación del juez que te toque. Ojo, y digo que te toque y es triste, pero la penetración ideológica del mundo de la judicatura es muy grande, como queda claro en esta sentencia". Por eso, insiste, no hay que hacer leyes ambiguas sino "una ley más estricta y detallada que respete los derechos civiles, porque la estrategia de la Unión Europa en la lucha contra el terrorismo se está cebando con la restricción de los derechos civiles. Eso es un error, porque el ciudadano lo que pide es que se le proteja de la lacra del terrorismo para disfrutar de esos derechos y libertades que son casi únicos en Europa y que ya no disfrutamos".
Un año de cárcel y seis años y seis meses de inhabilitación absoluta por unos tuits que "alimentan el discurso de odio, legitiman el terrorismo como fórmula de solución de los conflictos sociales y, lo que es más importante, obligan a la víctima al recuerdo de la lacerante vivencia de la amenaza, el secuestro o el asesinato de un familiar cercano". De este modo, el Tribunal Supremo ha revocado este jueves la sentencia de la Audiencia Nacional que absolvía a César Strawberry, líder de Def con Dos, de los delitos de enaltecimiento del terrorismo y humillación a las víctimas de ETA y los Grapo, y le ha condenado a un año de prisión.