Roures hace caja a costa de Prisa: recibe 30 millones 'extra' por los partidos del Canal+ Liga 2

Las cuentas las hacía recientemente el propio consejero delegado de Prisa, Juan Luis Cebrián. “De los más de 600 millones de euros que reciben anualmente los clubes españoles de fútbol por los derechos de la Copa y de la Liga, la mitad de la factura corre a cargo de Digital+”, aseguraba en la última Junta General de Accionistas, celebrada en el mes de junio. “Hemos insistido ante el juez y los administradores por él nombrados en la necesidad de que las cuantiosas sumas de dinero que entregamos a dicha compañía [Mediapro] vayan directamente a los clubes a fin de no poner en peligro la viabilidad de los mismos”, remachaba, en referencia al concurso de acreedores en que se encuentra la sociedad de Roures.

Mediapro solicitaba la suspensión de pagos en junio de 2010, después de que una sentencia del juzgado número 36 de Madrid pusiera en jaque su tesorería. La justicia obligaba a la firma a indemnizar a Prisa con 105 millones de euros por la ruptura del contrato firmado por ambas partes en 2006 para comercializar el fútbol. Lo que es peor, también le forzaba a traspasar los derechos de los clubes a Audiovisual Sport (AVS), filial de Sogecable. El concurso de acreedores paralizaba la ejecución de la resolución judicial, por otra parte recurrida a la Audiencia Provincial de Madrid. Una maniobra que permitía a Roures seguir cobrando de Prisa sin desembolsar un euro.

Los 30 millones más que recibirá este año Mediapro vienen a aliviar una situación que tampoco es boyante para el grupo de empresas del dueño de Público. Sin ir más lejos, el diario anunciaba esta semana un expediente de regulación de empleo para el 20% de su plantilla. Como publicó este diario, también prepara la venta de Overon, la empresa dedicada a la transmisión de señales de televisión cuya propiedad comparte con Abertis. Una transacción a la que no ha ayudado la pérdida del contrato de España Directo con RTVE, que le reportaba 13 millones de euros anuales. La compañía ha mantenido el formato en La Sexta, para no depreciar el producto.

Mediapro, ante el cambio de Gobierno

“Hay un cambio de Gobierno en ciernes, puede que ganen menos concursos y parece razonable que se replieguen hacia su negocio tradicional, el que mejor saben hacer, véase gestionar los derechos de los clubes. Es una sistema de take and pay -coger el dinero de las televisiones y pagar a los equipos- que no debería generarles problemas. Su futuro debería pasar por simplificar en alguna medida su estructura”, explican estas fuentes. Todo en medio de una guerra larvada. El accionista de La Sexta anunciaba a principios de enero el acuerdo alcanzado con sus acreedores para pagar su deuda íntegra en 35 meses y sin quitas. Apenas días después, el diario Cinco Días, editado por Prisa, recordaba que Mediapro acumulaba pérdidas de 45,3 millones en los dos últimos ejercicios auditados.

Y es que el Grupo Prisa no está dispuesto a quedarse quieto y ha aprovechado la inyección de liquidez de los hedge funds y firmas de inversión de Liberty para empezar a pactar con los clubes de fútbol y presionar a Mediapro. Recientemente anunciaba acuerdos con Real Zaragoza y Real Sociedad, que le ceden sus derechos para Digital+ a partir de las temporadas 2012 y 2013, respectivamente. El Athletic de Bilbao también se ha comprometido con Cebrián. Un escenario que obligará a que Prisa y Mediapro lleguen a puntos de acuerdo para la comercialización futura del fútbol, en tanto hasta ahora Roures poseía los derechos en exclusiva de los equipos y los negociaba para los distintos soportes.

El propio Cebrián no tenía dudas de que, pese a todo, un acuerdo con sus eternos adversarios de Mediapro era imprescindible a medio plazo. “Seguimos considerando que un acuerdo entre todos cuantos intervienen en la generación y explotación comercial de estos derechos es lo mejor para el usuario, para la competición y para las empresas involucradas, por lo que llevamos meses esforzándonos en culminar los pactos necesarios al respecto -aseguraba en la citada Junta-. Y somos más que optimistas respecto a su consecución”. Todo sin renunciar a “las indemnizaciones por los daños causados que los tribunales nos han concedido”.