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Oliart amenaza con dimitir al frente de RTVE apenas un mes después de su nombramiento
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POR DISCREPANCIAS CON EL CONSEJO DE ADMINISTRACIÓN

Oliart amenaza con dimitir al frente de RTVE apenas un mes después de su nombramiento

Alta tensión en el Consejo de RTVE celebrado ayer. Hasta el punto de que el presidente de la Corporación, Alberto Oliart, amenazó con presentar la dimisión

Foto: Oliart amenaza con dimitir al frente de RTVE apenas un mes después de su nombramiento
Oliart amenaza con dimitir al frente de RTVE apenas un mes después de su nombramiento

Alta tensión en el Consejo de RTVE celebrado ayer. Hasta el punto de que el presidente de la Corporación, Alberto Oliart, amenazó con presentar la dimisión apenas un mes y medio después de su nombramiento por el Congreso. El ex ministro de Defensa interpretó como una afrenta que parte de los consejeros le pidieran que pospusiera unos días los nombramientos de Santiago González y Benigno Moreno como directores de la televisión pública y RNE, respectivamente. Se pretendía que tuvieran más de tiempo para preparar su preceptivo examen ante el Consejo.

 

Oliart se rebeló. “Dijo que si no se aceptaba su propuesta, lo entendería como una censura personal y que se plantearía presentar la dimisión”, aseguran fuentes conocedoras del desarrollo del cónclave. Y es que más de un consejero le esperaba con ganas. “Había enfado porque la salida de Javier Pons y el nombramiento de González al frente de TVE debe debatirse y aprobarse en el Consejo, después de escuchar a los candidatos propuestos. No puede anunciarse antes, como se ha hecho. El sentir de los consejeros es que no se ha respetado el procedimiento, y se lo hicieron saber”, añaden.

Según ha podido saber El Confidencial, el presidente de RTVE llamó a casi todos los consejeros en plenas vacaciones navideñas e infirió que no había grandes discrepancias respecto a los elegidos para los cargos. Le pareció suficiente. El 7 de enero, el departamento de Comunicación lanzaba una nota en que anunciaba la marcha de Pons y quién sería su sustituto. Nadie en el Consejo entendió la premura en el anuncio, ni las formas. “El feeling es que no hubiera pasado nada porque Pons hubiera esperado dos o tres semanas. Y podría haberse visto en el Consejo, los candidatos podrían haber preparado la presentación de sus programas con calma, etc.”, aseguran estas fuentes.

“Todos los consejeros tuvieron que pasar por una Comisión de Nombramientos del Congreso. El propio Oliart tuvo que hacerlo. Los nuevos directores de TVE y RNE tenían que pasar ese trago ante el Consejo. Lo que no se puede hacer es pensar que la Corporación funciona como un ministerio, en el que como ministro puedes hacer y deshacer. En RTVE hay un Consejo de Administración al que rendir cuentas”, explican fuentes internas de la casa, constatando ese malestar. Al final, el presidente optó porque González y Moreno comparecieran en ese mismo momento. Una solución de compromiso que le permitió sacar adelante los nombramientos ayer mismo, aprobados por mayoría pero no por unanimidad.

De ceses y dimisiones

Tampoco hubo acuerdo en cómo vender la salida de Pons, un hombre próximo al anterior presidente, Luis Fernández. Según explican estas fuentes, Oliart había acordado con él que fuera un cese y no una dimisión, “probablemente para hacer más fácil el pago de la indemnización, que el presidente estaba de acuerdo en pagarle”, apuntan estas fuentes. Sin embargo, Oliart quería también añadir en el acta una felicitación unánime del Consejo a Pons por el desempeño en su cargo, una loa que subió los decibelios de la reunión y que algún consejero rechazó de plano. “¿Cómo vamos a felicitar a alguien después de cesarle? Otra cosa es que dimita”, se planteó. De acuerdo con estas fuentes, el finiquito de Pons estará entre los 150.000 y 200.000 euros.

No es el primer choque que tiene Oliart con parte de sus consejeros, que en privado no dudan en mostrar su sorpresa por “tintes autoritarios” como los mostrados ayer por el actual presidente de la Corporación. También su enfado por su toma de decisiones al margen del Consejo. “Se le pidió que congelara el despido del responsable del departamento comercial porque había una investigación en marcha sobre unas prácticas dudosas en el departamento. Pero le cesó, le dio una indemnización y dejó al Consejo sin al menos escucharle. Argumentó que quería pasar página rápidamente ante el fin de la publicidad el 1 de enero”, aseguran fuentes de la casa.

Oliart descubrió ayer algo que Fernández sufrió en la última parte de su mandato: el Consejo de Administración de RTVE es todo menos cómodo. Y Fernández, que pese a todo logró sacar adelante más del 90% de las votaciones por unanimidad en sus tres años de presidencia, vio en los últimos meses cómo su sugerida oposición a la nueva ley de financiación de la televisión pública enrarecía su posición en el Consejo. “Alguien ha debido asesorar mal a Oliart. Él debió pensar que era un paseo militar, pero…”, aseguran fuentes próximas a uno de los consejeros. Cuando amagó ayer con abandonar el cargo, los once consejeros debieron encogerse de hombros.

Alta tensión en el Consejo de RTVE celebrado ayer. Hasta el punto de que el presidente de la Corporación, Alberto Oliart, amenazó con presentar la dimisión apenas un mes y medio después de su nombramiento por el Congreso. El ex ministro de Defensa interpretó como una afrenta que parte de los consejeros le pidieran que pospusiera unos días los nombramientos de Santiago González y Benigno Moreno como directores de la televisión pública y RNE, respectivamente. Se pretendía que tuvieran más de tiempo para preparar su preceptivo examen ante el Consejo.

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