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Prisa planea segregar más áreas y un ajuste duro de plantilla
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BUSCA UN SOCIO TECNOLÓGICO PARA LA INFORMÁTICA

Prisa planea segregar más áreas y un ajuste duro de plantilla

El miércoles pasado se disparaban todas las alarmas en la plantilla de El País. En una nota remitida a los trabajadores por los Comités de Empresa

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Prisa planea segregar más áreas y un ajuste duro de plantilla

El miércoles pasado se disparaban todas las alarmas en la plantilla de El País. En una nota remitida a los trabajadores por los Comités de Empresa se aseguraba que la dirección del grupo había decidido “parcelar aún más las empresas escindidas de El País, segregando informática, administración…”, después de ya externalizar la publicidad a finales del pasado año. Y puede que no fueran desencaminados. Fuentes de la compañía al más alto nivel confirmaban a El Confidencial que “los gestores están convencidos de que la solución para Prisa pasa por cambiar el modelo de gestión y buscar un socio tecnológico importante capaz de optimizar los recursos del grupo”. La derivada es el coste que puede acarrear en términos de puestos de trabajo.

 

Las fuentes consultadas hablan de un expediente de regulación de empleo, aunque en la cúpula se descarta en principio esta opción, “a no ser que en cabeceras como Cinco Días se decida hacer una edición semanal en papel y el resto en digital”, aseguran estas fuentes. De momento, a los trabajadores en el diario económico se les ha garantizado la continuidad en papel. Otro frente es el abierto por el acuerdo con Mediapro para terminar con la guerra del fútbol y negociar una integración de sus áreas audiovisuales. “Tememos que, si se plantea un ERE, la sociedad más afectada sería Sogecable. La venta de Digital Plus, con fútbol, sería aún más fácil si se adelgaza la plantilla”, apuntan fuentes sindicales.

 

Precisamente ayer estaba prevista una reunión de los responsables de Recursos Humanos de Prisa con abogados del bufete Sagardoy para analizar las opciones que la empresa tiene sobre la mesa. “El despacho trabaja para Prisa desde hace tiempo. Hay encuentros frecuentes”, aseguraron fuentes conocedoras de los mismos, sin querer dar más precisiones. Sin embargo, desde una de las cabeceras no extraña que se busquen fórmulas entre los responsables de personal de las empresas del grupo para coordinar las acciones que se emprenden en las diferentes sociedades, que hasta ahora han ido casi cada una por su lado. En todo caso, en general se descartan anuncios relevantes antes de la Junta de Accionistas del próximo día 18.

 

“Se pueden eliminar algunas duplicidades entre empresas –aseguran fuentes internas de la compañía-. Pero, probablemente, es en América Latina donde hay demasiada gente. De los 14.000 profesionales que Prisa tiene en plantilla sobran por lo menos 2.000 personas”. Un portavoz del grupo admitía recientemente a El Confidencial la necesidad de hacer ajustes vía reorganizaciones, similares a las efectuadas a finales del pasado año en El País, que provocaron dos días de huelga. Entonces, el Consejo de Administración aprobó transferir a Box News Publicidad la comercialización y gestión de la publicidad del periódico. “No tenía sentido que se hiciera lo mismo desde dos instancias. Fórmulas de ese tipo sí se pueden buscar, sobre todo en el papel”, se explicaba entonces.

 

Recortes de sueldos

 

En todo caso, la prioridad del grupo de medios es lograr ahorros de costes, “que pasan inevitablemente por recortes de sueldos desde un 5% hasta un 15%, con una posible compensación cuando regrese la bonanza”, aseguran fuentes de dentro de la compañía. Sin ir más lejos, el pasado 2 de junio la dirección de El País reformulaba su propuesta de ajuste para los años 2009 y 2010. Según las nuevas cifras, la dirección quiere ahorrarse, entre julio y diciembre de 2009, 1,39 millones de euros. En el conjunto de 2010, el descuento con el que cargarían los profesionales sería de 2,77 millones. Estas cuantías son equivalentes al 8% de salario anual.

 

Tres son, sobre todo, las medidas que se plantean: convertir la aportación de la totalidad del plan de pensiones en cuatro días libres; proceder a una rebaja de la llamada paga de gratificación de productividad de un 32% en 2009, transformándola en cinco días libres, y de un 94% en 2010, a cambio de 14 días libres; y acometer un descuento directo en nóminas en la dirección. Los sindicatos han insistido en que sólo se sentarán a hablar si se mantiene el convenio colectivo en vigor para toda la plantilla de Ediciones El País y se incluye en el mismo a los aproximadamente 50 profesionales de Prisacom.

 

La propuesta de la dirección incluye un plan de recuperación de lo que se deje de percibir este año y el que viene. De este modo, se prevé entregar en 2011 el 50% de las cantidades ahorradas en el año 2009 correspondientes al plan de pensiones y a la paga de gratificación de productividad, siempre y cuando se alcancen unos beneficios de 25 millones de euros y una difusión de 420.000 ejemplares en 2010. En el año 2012 se recuperaría lo descontado en 2010 siempre y cuando los beneficios de ese año (antes de impuestos) superaran los 35 millones de euros y la difusión se elevara por encima de los 425.000 ejemplares.

 

En cabeceras como Cinco Días, la dirección ya planteó en abril a los trabajadores la necesidad de reducir durante este año en un millón de euros los gastos del periódico. Entonces, se pidió a los trabajadores “soluciones imaginativas”. Sobre la mesa, la puesta en marcha de programas de bajas incentivadas, la reducción general de salario y el posible traslado de la redacción a Miguel Yuste, sede de El País. Desde hace meses, el diario ya tiene externalizada el área informática. No obstante, según ha podido saber El Confidencial, hace al menos un mes que no se convoca al Comité de Empresa para proseguir con las conversaciones.

El miércoles pasado se disparaban todas las alarmas en la plantilla de El País. En una nota remitida a los trabajadores por los Comités de Empresa se aseguraba que la dirección del grupo había decidido “parcelar aún más las empresas escindidas de El País, segregando informática, administración…”, después de ya externalizar la publicidad a finales del pasado año. Y puede que no fueran desencaminados. Fuentes de la compañía al más alto nivel confirmaban a El Confidencial que “los gestores están convencidos de que la solución para Prisa pasa por cambiar el modelo de gestión y buscar un socio tecnológico importante capaz de optimizar los recursos del grupo”. La derivada es el coste que puede acarrear en términos de puestos de trabajo.