Acaba el Ramadán y... ¿Ahora qué? El Eid al-Fitr con el que se celebra el fin del ayuno

Este viernes 21 de abril se pone fin al Ramadán, el mes más importante para los musulmanes. Los practicantes de la religión del Islam llevan desde la semana del 20 de marzo cumpliendo un ayuno diurno, aunque cada año su duración depende del ciclo lunar.

El noveno mes del calendario islámico es un mes sagrado para los musulmanes, que no pueden ingerir alimentos ni beber agua durante las horas del día, aproximadamente desde las 5.30 horas hasta las 20.30 horas. Tampoco pueden mantener relaciones sexuales, fumar o decir palabrotas. Durante el Ramadán los musulmanes refuerzan su creencia religiosa rezando y leyendo el Corán. Durante este tiempo de reflexión intentan ponerse en el lugar de las personas más necesitadas, de ahí que se abstengan de comer.

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El Ramadán termina con el Eid al-Fitr, la fiesta del fin del ayuno que adquiere una forma diferente según el país. Según la tradición musulmana, estas fiestas se originaron en Medina después de la migración de Mahoma desde La Meca. Según los textos religiosos, el profeta islámico se encontró en Medina que la gente estaba de celebración durante dos días concretos, por lo que se acabó fechando dos días de fiesta.

Esta festividad religiosa comienza desde muy temprano con las primeras oraciones en la mezquita y un posterior desayuno para celebrar esta fiesta que en algunos puede durar hasta tres días. Luego es habitual que las familias se reúnan para comer los platos más tradicionales. En general, la fiesta musulmana se alarga todo el día para disfrutar del Eid al-Fitr con los más allegados.

En este día, los musulmanes estrenan ropa nueva, visitan a familiares y amigos, y es habitual que se hagan regalos. Durante la celebración también deben seguir los requisitos Sunna para celebrar el final del ayuno, como vestirse según la ley islámica, despertarse a la madrugada, comer dátiles o volver a casa por un camino diferente.