¿Por qué existe esta inusual y estrecha casa entre dos iglesias en Oporto?

Cuando vamos de viaje a otros países, una de las actividades más comunes para hacer es descubrir la arquitectura de la ciudad. Al visitar diferentes edificios emblemáticos, conocemos más acerca de la historia del lugar, de sus conflictos, de su religión y de su cultura. En el caso de Portugal, comparte aspectos arquitectónicos con España por proximidad.

Y es en Portugal, Oporto, donde ocurre un fenómeno urbanístico de lo más curioso. Alberto, un usuario de Twitter, ha compartido en su cuenta la historia que hay detrás de la Iglesia de los Carmelitas Descalzos, la Iglesia del Carmen y la estrecha casa que separa ambos edificios.

La Iglesia del Carmen, situada a la derecha, es un templo de estilo rococó. Fue construida en el siglo XVIII para los monjes carmelitas. Lo que más destaca de su diseño es el enorme mural de porcelana blanca y azul que cubre uno de sus costados, muy típico de la zona de Oporto. Por su parte, la Iglesia de los Carmelitas, situada al lado izquierdo del conjunto arquitectónico, fue construida un siglo antes, en el XVII, y pertenece a la orden de los Carmelitas Descalzos. Fue un antiguo convento de estilo barroco y cuenta con un campanario y una nave dorada interior.

Hay tres teorías para explicar su existencia

Hasta ahí todo normal. Sin embargo, si nos fijamos bien, entre ambas iglesias se encuentra un estrecho edificio que no tiene nada que ver con ninguno de los templos. Se trata de una casa, con una fachada sencilla de hormigón, dos ventanas y una angosta puerta. Se la conoce como “casa escondida” y sirve de separación intencionada entre la Iglesia del Carmen y la Iglesia de los Carmelitas. Esta vivienda llegó a estar habitada por el campanero de la torre.

Una de las explicaciones que dan los lugareños de este fenómeno arquitectónico es que, en la época, había una ley que no permitía edificar dos iglesias juntas, por lo que se construyó la vivienda para separarlas. Otra de las teorías es que los obispos de cada iglesia no se llevaban bien y solicitaron la construcción de la casa para que ninguno de los templos se tocase.

La tercera explicación viene de la época en la que había monjas en el convento y monjes en la Iglesia del Carmen. El objetivo de la casa era que estuviesen lo más separados posible y no intentasen confraternizar. Sea cual sea la verdadera razón, no deja de ser algo digno de mención. Actualmente, entrar a ambas iglesias es gratuito y también se puede visitar la casa, que está abierta al público, pero los visitantes deben pagar una pequeña cantidad por la entrada.